WHITE PLAINS, NY (AP) – El libro es oficialmente ficción: la historia de un presidente que desaparece mientras trata de prevenir un ataque cibernético apocalíptico.
Los autores, Bill Clinton y James Patterson, juran que podría suceder.
«Le estás pidiendo al Servicio Secreto, en efecto, que se aparte de su deber», dijo el ex presidente durante una reciente entrevista en el hotel Ritz-Carlton mientras él y Patterson discutían sobre «The President Is Missing», el thriller en el que trabajaron. en conjunto que sale esta semana. «(Pero) podría suceder. Si estuviera decidido a hacerlo, podría hacerlo».
«Una gran parte (la novela) lo sacaba de la Casa Blanca», dijo Patterson. «Sería irresponsable, pero dadas las circunstancias, era lo responsable».
EVENTS OF OUR BOOK COULD HAPPEN: Bill Clinton and James Patterson on their fictional book about a president who disappears as he tries to prevent an apocalyptic cyberattack pic.twitter.com/h7SQKnAkSQ
— AP Entertainment (@APEntertainment) June 3, 2018
Propensado a colaborar por el abogado de Washington Robert Barnett, que maneja acuerdos de libros para ambos, Clinton y Patterson recurrieron a sus respectivos antecedentes para completar una novela de 500 páginas que encabezó la lista de best-sellers de Amazon antes de la publicación. Patterson se encuentra entre los escritores de ficción más populares y prolíficos del mundo, y la novela es una narrativa característicamente rápida, con capítulos breves y giros dramáticos de la trama.
Clinton, una recién llegada a la escritura de novelas cuyos libros anteriores incluyen la autobiografía de millones de dólares «My Life», no necesitó mucha investigación para decirle a los lectores cómo es sentarse dentro de la Sala de Situación de la Casa Blanca o recibir información sobre un posible ataque terrorista, o imaginar deslizándose por completo.
«Jim quería que fuera auténtico», dijo Clinton. «Lo que significa: A, el entorno físico tiene que ser auténtico. B, los procedimientos tenían que ser auténticos, y la interacción entre el presidente y el personal y todos los líderes mundiales y todo tenía que tener la sensación de realidad, e incluso cómo el Servicio Secreto funciona «.
La novela ha recibido borrones de Mary Higgins Clark, Walter Mosley e incluso el autor de «Hamilton», Ron Chernow. El historiador le dijo a The Associated Press en un correo electrónico reciente que inicialmente estaba «dudoso» sobre el proyecto, pero quedó impresionado por la «combinación estilística» de los dos autores.
«Tengo que suponer que el ritmo nítido proviene de Patterson, pero no hay duda de que la autenticidad de los abundantes detalles debe mucho a los años de Clinton en la Casa Blanca», escribió Chernow. «El libro tiene una sensación interior y sabia».
Los lectores se sorprenderán al ver una experiencia que Clinton sabe bien que aparece en la novela: juicio político, como lo enfrentó el presidente Jonathan Lincoln Duncan, cuyos enemigos afirman que puso en peligro la seguridad nacional. La historia seguramente revivirá un punto histórico de sus años en la Casa Blanca, cuando fue enjuiciado en 1998 por la Cámara de Representantes, pero absuelto por el Senado, por cargos que se derivan en parte de su aventura con la pasante de la Casa Blanca Monica Lewinsky. El escándalo ya había aparecido en las noticias a principios de este año, y Lewinsky escribió que el movimiento #MeToo la obligó a mirar ese momento a través de una «nueva lente».
Pero Clinton expresó poca preocupación por mencionar la acusación. En la novela, Duncan señala que un presidente puede ser acusado por cualquier cosa, «No tiene por qué ser un crimen». Clinton dijo que quería presentar acusaciones que, de ser ciertas, merecerían su destitución.
«Nosotros (también) queríamos mostrar algo que si ibas a testificar ante el Congreso, o si ibas a hacer una conferencia de prensa completa, que tienes que – no me importa lo bueno que seas – tienes que como hacer una carrera de preparación, tienes que probarla, tienes que tener personas que trabajen para ti y te saquen la vida de encima «, dijo Clinton.
«Fuimos y volvimos en ese capítulo», dijo Patterson.
Clinton evitó las críticas directas al presidente Donald Trump durante la entrevista, pero le permitió al presidente Duncan unas pocas palabras sobre los derechos de voto (expandirlas), Dreamers y otros inmigrantes (los necesitamos) y el peligro para la democracia cuando «nos volcamos hacia el tribalismo, el extremismo y resentimientos hirvientes «. Ambos escritores dicen que quieren que el libro sea un giro de página y una reflexión. Clinton habló en detalle de sus preocupaciones desde hace mucho tiempo sobre los ataques cibernéticos, e incluso se refirió a uno a quien ayudó a frustrar mientras presidente que dice permanece clasificado. Expresó consternación porque el consejero de Seguridad Nacional, John Bolton, había eliminado el rol de coordinador cibernético establecido bajo el presidente Barack Obama (la razón declarada era para «simplificar la autoridad»). Explicó que debido a que el país es tan dependiente del acceso a Internet,
Toda la publicidad de los últimos dos años y medio ha consistido en hackear el Departamento de Estado y el DNC (Comité Nacional Demócrata) y el RNC (Comité Nacional Republicano) y no liberarlos», dijo Clinton, refiriéndose en parte a la Democracia. archivos pirateados y publicados durante las elecciones de 2016, cuando Trump derrotó a la esposa del ex presidente, Hillary Clinton. «Así que tal vez la forma en que te sientas al respecto depende de lo que sea tu partido político y cómo los medios eligen cubrir los hackeos. Pero es una parte tan pequeña de lo que es vulnerable al pirateo».
Clinton es el raro presidente incluso para intentar una novela: a Franklin Roosevelt se le ocurrió la idea inicial de lo que se convirtió en «The President’s Mystery Plot», un thriller serializado en el que trabajaron varios autores. Y él y Patterson podrían pensar en algunas obras de ficción que creen que efectivamente capturaron la vida de un presidente y la cultura política de Washington. Ambos mencionaron el «Asesoramiento y Consentimiento» de Allen Drury, que Clinton dijo que fue efectivo en parte porque no se enfocó solo en el presidente. Tenía elogios similares para programas de televisión como «The West Wing».
«‘The West Wing’ es bueno, pero ¿sabes la razón por la que funcionó? Y me encanta Martin Sheen, pensé que era realmente bueno», dijo Clinton. «Pero si lo piensas bien, para un programa semanal, lo usaron con moderación, en papeles principales. Es decir, ‘The West Wing’ funcionó durante tanto tiempo porque es un espectáculo de conjunto».
«Ambos pensamos ‘Señora Secretaria’ (es bueno)», agregó Patterson.
«‘Señora Secretaria’ es de lejos el programa político más realista en la televisión», dijo Clinton. «Me gusta ‘Veep’ y me encanta Julia Louis-Dreyfus. Disfruto ‘Scandal’. Disfruto mucho de ‘House of Cards’. Y siento mucha simpatía por lo que enfrentan. Pero es casi imposible tener al presidente al frente y al centro todas las semanas y mantenerlo real «.
