1. Esto lo cambia todo. El capitalismo contra el clima(Paidós)
Naomi Klein
No creo que nadie haya hecho tanto como Naomi Klein por convertir la crítica del capitalismo en una perspectiva política cercana y amigable. Su nuevo ensayo denuncia la incapacidad de las economías de mercado para solucionar los desafíos medioambientales que ellas mismas han creado pero, sobre todo, aborda cuestiones complejas relacionadas con el modo en que la salida al proceso de autodestrucción ecológica que padecemos es congruente con políticas igualitarias de justicia social.
2. Ver, oír y callar. Un año con la mara Salvatrucha (Pepitas de Calabaza)
Juan José Martínez D’aubuisson
Ver, oír y callar es un testimonio crudo y sobrio de la guerra de baja intensidad que viven los barrios populares de Centroamérica desde hace años a causa de los conflictos entre las bandas juveniles. Es un ejemplar cóctel de etnografía, periodismo de guerra y ensayo que consigue mostrar la cotidianidad de los jóvenes pandilleros con empatía pero sin dulcificar ni mitificar en ningún momento las maras.
3. Economía para el 99% de la población (Debate)
Ha-Joon Chang
Los dos últimos años pasarán a la historia de las ciencias sociales como el momento en el que empezó a agrietarse la hegemonía de la economía neoclásica. En este tiempo han ido apareciendo un buen número de propuestas teóricas alternativas muy solventes. Aquí Ha-Joon Chang, uno de los economistas heterodoxos más respetados e inteligentes de nuestro tiempo, recoge algunas de esas propuestas y las expone de un modo comprensible, sensato y generoso.
4. Islamofobia (Icaria)
Santiago Alba Rico
Santiago Alba Rico, tal vez el mejor ensayista español vivo junto con Rafael Sánchez Ferlosio, es además un gran experto en el mundo islámico. Su posición, matizada y nada dogmática, sobre las transformaciones políticas que están teniendo lugar en esos países le ha valido la antipatía no sólo de la derecha sino también de la izquierda más casposa. En este libro urgente reflexiona sobre el nuevo racismo islamofóbico que amenaza nuestras sociedades.
[Lee nuestra selección de libros para vacunarse contra la islamofobia]
5. No hay dos iguales. Individualidad humana y naturaleza humana (Funambulista)
Judith Rich Harris
Judith Rich Harris se dio a conocer con El mito de la educación, un ensayo que hizo saltar por los aires uno de los consensos más sólidos de las ciencias sociales contemporáneas al defender la escasa influencia que tienen los padres en cómo acaban siendo sus hijos. No hay dos iguales es la continuación lógica de aquella primera obra. Al fin y al cabo la socialización es un proceso que contribuye a que los niños se parezcan entre sí. ¿Qué es lo que hace, entonces, que nos diferenciemos? ¿Por qué incluso los gemelos idénticos tienen personalidades diferentes?
6. Anatomía de una epidemia. Medicamentos psiquiátricos y el asombroso aumento de las enfermedades mentales (Capitán Swing)
Robert Whitaker
Anatomía de una epidemia es una investigación acerca de cómo la evolución en nuestras sociedades de las enfermedades mentales y su tratamiento han seguido una trayectoria inversa a la que cabría esperar. El desarrollo de un amplio corpus de conocimiento psiquiátrico experto y de medicamentos “revolucionarios” no ha disminuido la incidencia de esas enfermedades en la población, al contrario, parece haberlas incrementado exponencialmente. En este ensayo riguroso y divertido, Whitaker explica el modo en el que la medicina ha patologizado malestares y conflictos personales y sociales, generando una auténtica pandemia cuya principal beneficiaria es la industria farmacéutica.
[Su autor pasó por Carne Cruda!]
7. El hambre (Anagrama)
Martín Caparrós
Un ensayo-río ambicioso, profundo y muy literario elaborado a partir de una gran cantidad de historias personales que hablan sobre las formas más extremas de pobreza. El hambrees el resultado de los viajes de Martín Caparrós por India, Bangladesh, Níger, Kenia, Sudán y, finalmente, España. En cada uno de esos lugar se encontró con gente que pasa hambre y se preguntó por los mecanismos sociales que llevan a esa situación.
[En eldiario.es somos tan fans que le entrevistamos no una sino dos veces sobre este libro [ «Es más fácil vivir sabiendo que el hambre lo van a pasar otros» + «Los bancos son indispensables para que el capitalismo funcione; los hambrientos, no»] y otra sobre Lacrónica [ «Querer escribir sin leer es como querer tocar la guitarra sin haber escuchado música»].
8. La vida me sienta mal. Argumentos a favor del arte romántico previos a su triunfo (El Desvelo)
Alberto Santamaría
La vida me sienta mal es un gran ensayo de arqueología literaria que consigue plantear cuestiones profundas acerca del romanticismo histórico sin una pizca de pedantería ni academicismo. Alberto Santamaría logra que nos sintamos profundamente interpelados en pleno siglo XXI por el gran descubrimiento estético del romanticismo: que la comprensión de la realidad sólo es posible gracias la potencia expresiva de nuestra subjetividad, que nuestra sensibilidad inyecta sentido en un mundo que así se vuelve comprensible.
9. El Establishment. La casta al desnudo (Seix Barral)
Owen Jones
Owen Jones se dio a conocer en 2011 con Chavs. La demonización de la clase obrera, un ensayo en el que denunciaba la estigmatización neolibeal de las clases populares. Complementa perfectamente aquel primer texto al plantear que la desregulación económica ha producido una subordinación de las élites políticas a los poderes económicos y una oligarquización extrema de los instrumentos de representación democrática. A través de entrevistas, datos y un uso inteligente de la teoría política, Jones hace un retrato brutal de la estructura de privilegios que sostiene el poder de las élites.
[Le hemos entrevistado varias veces, por este libro y por el anterior]
10. Espectros del capitalismo (Capitán Swing)
Arundhati Roy
En este breve panfleto Arundati Roy plantea cuestiones cruciales y de máxima actualidad acerca de la relación entre democracia e igualdad. Describe la India –un país elogiado habitualmente en los medios de comunicación por su crecimiento económico y por ser la mayor democracia del mundo– como el escenario de una guerra sin cuartel contra 800 millones de pobres en el que las megacorporaciones no dejan de incrementar su poder con la complicidad del Ejército, el Gobierno y numerosas ONG. Una imprescindible apología de las víctimas del capitalismo contemporáneo.
