Gobierno contempla aplicar las reformas en tres fases entre este año 2021 y el 2024

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La Estrategia Nacional de Competitividad presentada por el Gobierno contempla aplicar un proceso de tres fases para las reformas que requiere el país para ser más próspero y pasar del ingreso medio alto a ser una economía avanzada, mediante el consenso con los sectores políticos y sociales.

Estas tres fases iniciarán con un consenso político y social sobre los objetivos deseados, en primer lugar, para en un segundo momento identificar las propuestas de las reformas y culminar con una tercera fase que permita la creación de un organismo supervisor y de monitoreo que evalúe las medidas independientes adoptadas.

Las reformas propuestas deberán ser implementadas de manera gradual y secuencial entre este año 2021 y el 2024, ante el impacto del Covid-19. El Consejo Nacional de Competitividad identificó 400 acciones y reformas que no han sido implementadas en los últimos 10 años y de estas seleccionó 138 de alta prioridad, entre las que figura el Plan de Seguridad Ciudadana, dentro de la Reforma Policial, que tendrá como ejecutor al Ministerio de Interior y Policía.

La mayoría de las medidas, 37 en general, corresponden al tema de la reforma fiscal. Las 138 propuestas priorizadas se agruparon en 16 temas, vinculados a los pilares más débiles de la competitividad del país.

La Estrategia Nacional de Competitividad fue presentada por el presidente Luis Abinader este martes y en ella se enmarca una serie de pasos que van desde un repaso a la competitividad del país, el país soñado, la metodología para encontrar las reformas, reflexiones sobre estas, concertación, ejecución y supervisión de la estrategia y las acciones que se adoptarán para las reformas que serán aplicadas en los cuatro años.

Uno de los puntos de partida para lanzar la estrategia radica en el pobre resultado alcanzado por el país en el último reporte del Foro Económico Mundial sobre el Índice de Competitividad Global (ICG) aplicado en 141 países en 2019. En el ICG de 2019, República Dominicana obtuvo una calificación de 58 puntos sobre la base de 100, “prácticamente reprobando en materia de competitividad”.

Al respecto, se identificaron oportunidades para mejorar la competitividad ante las deficiencias en los pilares institucionales, cuya puntuación fue de 50 puntos; adaptación tecnológica 52, educación 59 puntos, tamaño del mercado de bienes y servicios 54, y en el área de innovación 35, la cual representa la menor puntuación entre todos los pilares.

El Consejo Nacional de Competitividad (CNC) se plantea tres objetivos a corto, medio y largo plazo que van desde lograr ser el país más competitivo de Centroamérica y el Caribe, tomando en cuenta que hay que pasar de 58 puntos del ICG a 65 puntos en el 2024.

Como segundo objetivo se propone convertir al país en el más competitivo de América Latina en los próximos 10 años, al alcanzar una participación de 71 puntos del ICG y haber superado las metas de la Estrategia Nacional de Desarrollo 2030. Y, como tercer objetivo, llevar al país a estar dentro de las 20 naciones más competitivas del mundo, mediante reformas.

Abinader llamó a trabajar juntos

Iniciativa

Fue enmarcada en sacar provecho de las oportunidades que presenta la crisis y poder competir en el mundo globalizado y tecnológico y en mostrar que el tamaño de la economía no es óbice para lograr los objetivos planteados de ser el país más competitivo de la región.

Ventajas y retos

La Estrategia Nacional de Competitividad fue encomendada al CNC por el Presidente Abinader el pasado 11 de noviembre de 2020, para sustentar las ventajas competitivas del país, alineadas con la END, reconocer los grandes obstáculos que se han enfrentado coyuntural e históricamente en la nación dominicana y redefinir las políticas públicas, pautar prioridades y anticipar retos de la cuarta revolución industrial y el Covid-19.

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