Como suele ocurrir en cada cita olímpica, los deportes en los que se destacan argentinos despiertan el interés popular. Y el caso de Paula Paretono fue la excepción: el país entero se emocionó por su oro en Río de Janeiro y el judo ganó crédito para los ajenos a la disciplina.
Muchas mujeres le escapan a los deportes de contacto, pero la Peque las motivó para animarse a practicar el arte marcial que la transformó en laprimera argentina en obtener una medalla de oro.
Movilizada por la cantidad de gente que la alentó durante la competencia, puso a la par de su entrenamiento físico con las sesiones con un psicólogo que la ayuda a enfocarse y concentrarse en sus labores. «Fue lo que me dio resultado para llegar al cien por ciento», reveló la judoca de 30 años.
Además, explicó cómo organizó su agenda deportiva y académica con competencias y exámenes que se le cruzaban durante el año y al haber aumentado su exposición por la conquista en Brasil, los medios de todo el mundo la bombardearon a preguntas, razón por la cual anticipó que realizará un curso rápido de inglés.