Las mujeres que sirvieron en la guerra de Vietnam con EE.UU.

1210
0
Compartir
Claire Brisebois Starnes tenía 17 años cuando se alistó en el Ejército de Estados Unidos para ir a la guerra de Vietnam. No sabía "lo duro que sería", asegura.

Cuando, en 1963, Claire Brisebois Starnes se alistó en el Cuerpo de Señales del Ejército de Estados Unidos, era una muchacha delgada de apenas 17 años de edad a quien le pedían que comiera más plátanos para subir de peso.

Seis años después, se ofreció como voluntaria para viajar al otro lado del mundo y servir en la Guerra de Vietnam.

Conocí a Claire, junto a Ruth Dewton y Jeanne Moran Gourley, ambas veteranas de Vietnam, en el Memorial a los Veteranos de Vietnam en Washington DC, también conocido como «la Pared de Vietnam» o, simplemente, The Wall («la Pared»).

Son solo algunas de las más de 1.000 mujeres, no combatientes, que sirvieron como oficiales de línea y oficiales de administración y que fueron parte del personal alistado en el Ejército, la Fuerza Aérea, la Armada y la Marina estadounidenses en Vietnam.

Las Veteranas de Vietnam Ruth Dewton, Claire Brisebois Starnes y Jeanne Gourley en el Monumento Conmemorativo a los Veteranos de Vietnam, en Washington DC, Estados Unidos.
Las Veteranas de Vietnam Ruth Dewton, Claire Brisebois Starnes y Jeanne Gourley en el Monumento Conmemorativo a los Veteranos de Vietnam, en Washington DC, Estados Unidos.

Claire pasó 17 años siguiendo la pista a aquellas mujeres que sirvieron en la guerra -en roles que no fueran de enfermería- para escribir su libro «Women Vietnam Veterans: Our Untold Stories» (Mujeres veteranas de Vietnam: nuestras historias no contadas).

Tras medio siglo de silencio, estas mujeres olvidadas son recordadas en esta monumental antología. Es larga, pesada, grabada con sus nombres, pero necesaria. Es la «Pared» de estas mujeres.

Claire sirvió como traductora antes de convertirse en fotoperiodista y supervisar las publicaciones del Comando de Asistencia Militar en Vietnam, Grupo de Estudios y Observaciones (MACV, por sus siglas en inglés).

«Fui allá para ver qué estaba pasando», dice Claire. «Tenía que ir y verlo por mí misma. Vi que no eran los militares quienes estaban dirigiendo esa guerra, sino los políticos».

Viajó con una cámara Nikon del Ejército y con su propia cámara Petri, tomando instantáneas en película Kodak en color y en blanco y negro.

Claire Brisebois Starnes en Vietnam
CLAIRE STARNES / US ARMY Image captionClaire Brisebois Starnes fue reportera gráfica en Vietnam

Volando en helicópteros por todo Vietnam, pronto aprendió que debía sentarse sobre su chaleco antibalas para protegerse de los proyectiles y la metralla que podían golpear el tren de aterrizaje.

Sus fotos son extremas: tiroteos en barrizales y cuerpos, niños en orfanatos, edificios destrozados, el artista estadounidense Bob Hope entreteniendo a las tropas y al Cuerpo de Mujeres del Ejército (WAC, por sus siglas en inglés), con rulos en el pelo.

«No tenía ni idea de lo duro que sería. Cuando tomo fotos nunca me permito sentir nada», dice Claire.

«Tenía que desconectar emocionalmente. Fue cuando llegue a casa que empecé a darme cuenta de lo que había visto».

Soldados estadounidenses de la Primera División de Caballería aterrizando cerca de Fiddler's Green, en julio de 1969.
CLAIRE STARNES / EJÉRCITO DE ESTADOS UNIDOS Image captionSoldados estadounidenses de la Primera División de Caballería aterrizando cerca de Fiddler’s Green, en julio de 1969.
Un médico australiano realiza una cura a un soldado herido, al sur de Soc Trang en el Delta del Mekong, en febrero de 1970.
CLAIRE STARNES / EJÉRCITO DE ESTADOS UNIDOS Image captionUn sanitario australiano realiza una cura a un soldado herido, al sur de Soc Trang en el Delta del Mekong, en febrero de 1970.
Un soldado del Regimiento de Infantería 25 antes de una misión en la provincia de Tay Ninh, en noviembre de 1969.
CLAIRE STARNES / EJÉRCITO DE ESTADOS UNIDOS Image captionUn soldado del Regimiento de Infantería 25 antes de una misión en la provincia de Tay Ninh, en noviembre de 1969.

La foto que quedó grabada en su mente es la imagen de una niña pequeña jugando dentro de un alambre de púas.

«Podría haberse lastimado. Parecía tan feliz en ese momento… y sin embargo había cráteres a su alrededor. En general, los niños eran muy fuertes. O tal vez no comprendían la seriedad de la situación», explica Claire.

Una niña juega en un alambre de púas, en Vietnam.
CLAIRE STARNES / EJÉRCITO DE ESTADOS UNIDOS Image captionUna niña juega en un alambre de púas, en Vietnam.

En marzo de 1973 se retiraron las tropas estadounidenses y las mujeres del WAC que quedaban. Según los cálculos, unos cuatro millones de personas perdieron la vida en la Guerra de Vietnam.

Para la mayoría de los veteranos que regresaban no había un «bienvenido a casa». Les acosaban y escupían a su llegada al aeropuerto. Y eso era solo el principio de las secuelas, que sufrirían en privado.

Pronto aprendieron a guardar silencio, especialmente las mujeres, sobre su experiencia en Vietnam.

Muchas trataron de seguir adelante con su vida, su carrera y su familia, enterrando sus cicatrices, internas y externas; vergüenza u orgullo; horror u honor; todo ello mezclado con los recuerdos de las amistades forjadas y los amores encontrados.

Y muchas murieron sin atreverse a contar que sirvieron en Vietnam.

Todas ellas creen que cambió su vida, para bien o para mal pero, indudablemente, para siempre.

Claire regresó a Estados Unidos después de cinco visitas, y con una medalla de Servicio en Vietnam con la Estrella de Plata, con una medalla de la campaña de Vietnam y con una Cruz a la Valentía de la República de Vietnam.

También trató de enterrar sus recuerdos con el trabajo, la carrera y los niños pero, al final, buscó ayuda en un grupo de terapia para veteranos de Vietnam.

Ella era la única mujer y sufrió acoso verbal por parte de sus compañeros. Trató de explicar que en Vietnam no había zonas seguras, que todo el mundo que sirvió en el Ejército estaba en combate, pero no querían escucharla.

Se fue sintiendo vergüenza, y nunca más trató de buscar ayuda.

Starnes consuela a una visitante en el Vietnam Veterans Memorial, conocido como
Starnes consuela a una visitante en el Vietnam Veterans Memorial, conocido como «la Pared de Vietnam», en Washington DC, Estados Unidos.

En 1997, junto a otra veterana, Pricilla Landry Wilkewitz, visitó el Monumento Conmemorativo a las Mujeres del Servicio Militar de Estados Unidos (WIMSA, por sus siglas en inglés).

Ambas llevaban puesto un chaleco azul con las fechas en las que sirvieron en la guerra en la espalda, con la esperanza de que otras mujeres que también sirvieron en Vietnam las vieran.

En 1999 formaron la asociación Mujeres Veteranas de Vietnam (WWV, en inglés).

El monumento conmemorativo a las Mujeres de Vietnam está situado a pocos metros de la
El monumento conmemorativo a las Mujeres de Vietnam está situado a pocos metros de la «Pared de Vietnam» (The Wall).

Ese mismo año, el grupo celebró su primera conferencia en Olympia, Washington. Por primera vez, se reconocía a las mujeres veteranas de Vietnam, y estas escuchaban las palabras «gracias» y «bienvenida a casa».

«Pude comenzar a hablar sobre ello en 1997. No me atrevía a contarlo porque nadie lo entendía realmente. A nadie le importaba, nadie estaba interesado, y eso dolía mucho», relata Claire.

Este es el edificio conmemorativo a los veteranos de Vietnam en Washington DC, Estados Unidos.

Edificio conmemorativo a los veteranos de Vietnam en Washington DC, Estados Unidos.
Algunas flores decoran el edificio conmemorativo a los veteranos de Vietnam en Washington DC, Estados Unidos.

Mientras caminamos por el National Mall, lejos del destello del Monumento Conmemorativo a los Veteranos de Vietnam en Washington, la gente observa el chaleco de Claire.

Una mujer, llorando, se le acerca. Otra le pregunta: «¿Puedo abrazar a una veterana?».

Un veterano que vende folletos acaricia su garganta, donde le golpeó la metralla, y le dice:»Cuando regresé a casa me llamaban asesino de niños».

No hay comentarios

Dejar una respuesta