Por qué los medicamentos son tan caros en EEUU (y qué pueden hacer los políticos para abaratarlos)

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El aumento en un 400% del precio de un medicamento para personas alérgicas indignó esta semana a pacientes, médicos e incluso políticos. Pero la historia de EpiPen no es un caso aislado en Estados Unidos.

Los precios de las marcas de medicamentos más comunes escalaron un 164% entre 2008 y 2015, mientras que la inflación de la economía fue del 12% en el mismo periodo, según el Institute for Healthcare Informatics.

Es el país desarrollado con el mayor gasto por habitante en medicamentos con receta. Por ejemplo, para un mismo tipo de insulina, el precio medio para un paciente con seguro médico en Estados Unidos puede duplicar el precio de Canadá y triplicar la cifra que pagan los alemanes.

Tanto el candidato presidencial republicano, Donald Trump, como la demócrata, Hillary Clinton, se quejaron de los precios de los medicamentos y ofrecen planes para remediarlo.

Pero, ¿por qué los medicamentos son tan caros en Estados Unidos? ¿Y los políticos, qué pueden hacer algo para evitarlo? Regulaciones en manos del Congreso tienen mucho que ver:

1. La libertad para marcar el precio

Hay varios países donde los sistemas públicos de salud negocian los precios con los fabricantes. Aquí, en Estados Unidos, los productores pueden marcar de forma independiente el precio del producto.

“A veces no queda otra alternativa que ofrecer a los pacientes ese medicamento concreto con ese precio para que resuelvan la patología”, dijo a Univision Noticias el médico Aaron Kesselheim, que publicó esta semana una investigación sobre los altos precios de los medicamentos en Journal of the American Medical Association.

2. La larga exclusividad del medicamento

Quien ejemplifica mejor los precios por la nubes son los medicamentos con marca registrada, como los polémicos Daraprim (que se encareció un 5,000%) y EpiPen (un 400%).

Actualmente este tipo de medicamentos, que viven en el mercado sin la competencia de los genéricos, representan solo un 10% de las recetas… pero un 72% del gasto de los consumidores, añade el informe. ¿Y qué se puede hacer?

Investigadores y asociaciones de médicos apuntan a la regulación existente: hay provisiones de exclusividad promovidas por las agencias federales de Patentes y también de Drogas y Medicamentos. Esa exclusividad dura, de media, entre 12 y 15 años.

3. La dificultad para expandir los genéricos

Cuando se acaba la exclusividad y esa fórmula puede comercializarse como genérico, los precios bajan. Sin embargo, el estudio advierte de “estrategias empresariales y legales” para aumentar todavía más el tiempo sin genéricos.

Las farmacéuticas pueden introducir pequeños cambios y reformulaciones, lo que genera una nueva patente y extiende todavía más los años de monopolio de la marca.

La industria sanitaria y farmacéutica se gastó el año pasado unos 240 millones de dólares para hacer lobby en Washington DC, según OpenSecrets.

4. La escasa negociación con las farmacéuticas

Medicaid cubre las recetas médicas de unos 72 millones de estadounidenses de bajos ingresos y Medicare de cerca de 40 millones de ancianos. Sin embargo, por ley, estos dos grandes programas de ayuda pública no pueden negociar precios con las farmacéuticas.

Sí puede, en cambio, la administración que se ocupa de la salud de los veteranos, que de media consigue rebajar un 24% de media el precio. El Congreso podría extender ese poder de negociación a las otros dos grandes programas federales.

5. Las dudas sobre el costo de investigar

Las farmacéuticas alegan que, detrás del precio y de los años de monopolio, se esconde el alto costo de investigar y desarrollar medicamentos pioneros. El estudio publicado en el Journal of the American Medical Association se muestra incrédulo ante esas explicaciones.

Por un lado, detrás de las investigaciones suele haber dinero público, ya sea de instituciones académicas o programas federales como los National Institutes of Health. Un estudio de los últimos 25 años detectó que la mitad de los productos analizados habían contado con ayuda pública.

Por otro, el estudio no encuentra que el costo sea tan alto, entre un 10 y un 20% en inversión en investigación y desarrollo.

6. Seguros que abonan menos dinero

El sector de los seguros médicos tiende a ofrecer más productos que cubren menos el costo de los medicamentos. Son los llamados seguros con deducible alto.

«Lo que solía ser cubierto por los seguros ahora recae en el bolsillo, lo que está limitando el acceso a ciertos medicamentos por parte de la gente más humilde”, dijo a Univision Noticias el doctor Steven Ullmann, experto en la industria sanitaria.

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