Los manifestantes planean burlarse del presidente Donald Trump con un globo gigantesco que lo representa como un bebé gritón anaranjado hoy al tiempo que decenas de miles de personas marchan por las calles de Londres en protesta por la visita del mandatario estadounidense al Reino Unido.
El bebé en pañales, con un copete y un teléfono celular para tuitear, se elevará sobre el palacio de Westminster, que alberga las dos cámaras del Parlamento y que será el centro de las protestas contra las políticas de Trump sobre varios temas que van de la inmigración y las relaciones raciales a las mujeres y el cambio climático.
“Esperamos que a cualquier lugar que trump vaya, escuche y vea la fuerza de una opinión británica que lo rechaza no sólo como persona y sin importa qué tan desagradable es como persona, sino las políticas que representa”, declaró Asad Rehman, organizador de las llamadas Protestas en Reino Unido Contra la Visita de Trump.
La indignación por la visita de Trump de antemano ha tenido consecuencias. Una semana después que Trump rindiera juramento como presidente de Estados Unidos, la primera ministra Theresa May lo invitó a Gran Bretaña para una visita de Estado, el tipo de acto que por lo general incluye carruajes tirados por caballos y una cena de Estado organizada por el monarca. Eso se transformó en esta “visita de trabajo” de dos días mucho menos pomposa y que se registra en medio de preocupaciones sobre seguridad y las multitudes en el centro de Londres.
Los organizadores de la protesta indicaron que planean realizar marchas en cerca de 50 ciudades de todo el Reino Unido.
