Antonio Tajani, presidente del Parlamento Europeo, anunció que no reconocerá la elección de la Asamblea Constituyente realizada el domingo en Venezuela, que fue calificada por el organismo como «fraudulenta e ilegítima«.
«Es un día triste para la democracia en Venezuela, América Latina y el mundo, al violarse la propia constitución del país y tratados internacionales contra la voluntad de la gente«, manifestó. Tajani condenó la represión, que «alcanzó niveles impensables», e instó a la comunidad internacional a condenar al régimen chavista.
«Como presidente del Parlamento Europeo, la única institución elegida directamente por ciudadanos, le doy mi total apoyo a los representantes del pueblo venezolano: la Asamblea Nacional«, expresó el italiano, en referencia al congreso, bajo control opositor desde la última elección.
«Está muy claro que el régimen actual se está aferrando al poder. La voluntad de la gente es cambiarlo. Es necesario ir a nuevas elecciones ya», resaltó. Además, indicó que ha conversado recientemente con Leopoldo López, preso político del chavismo al que le fue concedida la cárcel domiciliaria.
Condiciones dudosas y violentas
A su vez, el Servicio de Acción Exterior de la Unión Europea expresó su «preocupación por el destino de la democracia» en Venezuela. La Asamblea Constituyente elegida en Venezuela «no puede ser parte de la solución«, advirtió este lunes la Unión Europea(UE), que condenó el «desproporcionado» uso de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad durante la jornada de votación y cuestionó las condiciones en las que se convocó y realizó la elección.
«Una Asamblea Constituyente, elegida en condiciones dudosas y con frecuencia circunstancias violentas no puede ser parte de la solución. Ha aumentado la división y deslegitimará más las instituciones elegidas democráticamente en Venezuela«, dijo en un comunicado la portavoz del Servicio de Acción Exterior de la UE.
En ese sentido, el bloque europeo expresó su «preocupación por el destino de la democracia en Venezuela», y puso en tela de juicio el visto bueno sobre el proceso. «La Comisión tiene serias dudas acerca de si el resultado de las elecciones puede ser reconocido«, declaró la vocera del ejecutivo comunitario Mina Andreeva, después que España, México, Colombia, Argentina y Estados Unidos, entre otros, anunciaran que no reconocerán los resultados de la votación.
«Venezuela tiene instituciones legítimas y democráticamente elegidas cuyo papel es trabajar conjuntamente y encontrar una solución negociada a la actual crisis», agregó el servicio de política exterior del bloque en un comunicado, que instó al régimen chavista a velar por los derechos fundamentales y el respeto a las manifestaciones opositoras.
El texto no mencionó si la UE estaba considerando la imposición de sanciones sobre Venezuela, como sí considera Estados Unidos, aunque la posibilidad ha sido llevada al seno del organismo, principalmente por medio del gobierno español.
El domingo marcó una de las jornadas con más fallecidos desde que comenzaron las masivas protestas a principios de abril en Venezuela, donde los votantes boicotearon ampliamente las elecciones para un organismo constitucional buscado por el impopular mandatario venezolano. «El destino de la democracia en Venezuela es una legítima preocupación para todos los países de la región y los socios de Venezuela a través del mundo», agregó la UE.
En sintonía se manifestaron los gobiernos de Italia, Francia y Alemania.
Roma apuntó que el proceso «no encuentra legitimación democrática», París consideró que la Constituyente «amenaza con agravar todavía más las fuertes tensiones que atraviesa el país y Berlín consideró que la elección se produjo «sin las debidas garantías» democráticas de libertad ni confidencialidad del voto y bajo un clima de violencia, apuntando que la Asamblea está orientada a «debilitar y desprestigiar» instituciones existentes.
