La Semana Santa, período en que se conmemora la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús de Nazaret, es esperada por muchos, unos con sentido cristiano y otros sólo como un tiempo para tomar unos días de vacaciones, lejos de los afanes del día a día.
Para quienes la esperan con espíritu religioso, es el tiempo litúrgico más valorado, de recogimiento y reflexión, pero para quienes sólo lo ven desde el punto de vista festivo, son días ideales de esparcimiento y para divertirse algunos moderamente, pero otros por actuar con imprudencia pierden la vida durante el asueto.
Un muestra de esto es el saldo de fallecidos el año pasado durante esta fecha, con un total de 12 personas muertas en diferentes circunstancias, según informó el Centro de Operaciones de Emergencia (COE) en su boletín número 2 del “Plan Operativo Triduo: Semana Santa 2015, por la prudencia y los valores”.
Al respecto, el pastor evangélico Francisco Segura considera que esta conmemoración solemne se ha desviado del propósito esencial para dar lugar al “libertinaje y el desenfreno”.
“Fíjate que esta semana es donde ocurren más accidente, donde personas pierden la vida por actuar desenfrenadamente. Si realmente fuera santa y tomara por el sentido correcto las autoridades no tendrían que montar todo un operativo para prevenir las desgracias, pero lamentablemente muchos usan esta llamada semana mayor para todo menos para dedicarle un espacio a la reflexión”, señaló Segura.
La creencia del cristianismo para la Semana Mayor es que Dios el padre envió a su hijo Jesús a este mundo para redimir a la humanidad de sus pecados. Esto se materializa cuando Jesús mure en la cruz del Calvario tomando el lugar del pecador.
La Semana Santa inicia el Domingo de Ramos y finaliza el Domingo de Resurrección. La fecha de la celebración es variable (entre marzo y abril según el año) ya que depende del calendario lunar.
La Semana Mayor va precedida por la Cuaresma, que finaliza en la Semana de Pasión donde se celebra la eucaristía en el Jueves Santo, se conmemora la Crucifixión de Jesús el Viernes Santo y la Resurrección en la Vigilia Pascual durante la noche del Sábado Santo al Domingo de Resurrección.
El sacerdote Alejandro de la Cruz explica que el origen de la Semana Santa está en el inicio del cristianismo pero logra su mayor auge en el siglo IV con el emperador Constantino y su madre santa Elena, quienes dispusieron las construcciones de grandes basílicas o pequeñas ermitas sobre los lugares donde real o supuestamente habían ocurrido los momentos más importantes de la vida de Jesús.
“Los peregrinos queriendo visitar los lugares de la pasión, obligaron a organizar celebraciones en dichos lugares el mismo día y a la misma hora. Nació así en Jerusalén la Semana Santa y los peregrinos extendieron este uso por todas las iglesias”, dijo.
Actividades cristianas
Las iglesias católicas en Semana Santa realizan diferentes actividades que incentivan a valorar el sacrificio de Cristo en la Cruz.
Por ejemplo, el Domingo de Ramos se realiza un servicio con cánticos animados que rinde loor al nombre de Jesús, mientras que las actividades del jueves santos, viernes santos y sábado santo son más solemnes, ya que estos días se conmemora el inmenso dolor y sufrimiento que padeció Jesucristo y sus seguidores al ver a su maestro crucificado.
El júbilo retorna el domingo de resurrección porque ese día se recuerda la victoria que de Jesús sobre la muerte y la redención de la humanidad.
