La Sociedad Dominicana de Psiquiatría (SDP) lanzo un llamado a las autoridades y a la población general sobre la urgente necesidad de aumentar la inversión en salud mental en el país, en el marco de los desafíos crecientes que enfrenta la población dominicana en esta área.
Psiquiatras, en un breve conversatorio con la prensa, expresaron su preocupación por la situación actual de la salud mental en el país.
En un contexto global en el que 970 millones de personas viven con algún trastorno mental, la República Dominicana no es la excepción. Se estima que en 2024, aproximadamente el 20% de la población dominicana sufre de algún trastorno mental, siendo los más prevalentes los trastornos de ansiedad, trastornos depresivos, trastorno bipolar y la esquizofrenia.
El suicidio es un problema de salud pública significativo a nivel global, con más de 700,000 personas que mueren por suicidio cada año, lo que equivale a 1 de cada 100 muertes a nivel mundial.
Entre los jóvenes de 15 a 29 años, el suicidio es la cuarta causa de muerte, después de las lesiones por accidentes de tráfico, la tuberculosis y la violencia interpersonal.
Ampary Reyes, presidenta de la SDP, destacó que, a pesar de los esfuerzos realizados, aún quedan retos significativos por abordar.
«Nosotros, como país, tenemos un reto. Hemos logrado, durante todo este tiempo, identificar la problemática de la salud mental y el aumento de los problemas relacionados con las enfermedades mentales», expresó Reyes.
Además, subrayó la distinción entre salud mental y psiquiatría: «Cuando hablamos de salud mental, nos referimos al bienestar integral, mientras que la psiquiatría maneja trastornos específicos».
En República Dominicana, el suicidio también ha mostrado un incremento en los últimos años.
Entre 2019 y 2023, la tasa de suicidios varió entre 6.60 y 7.13 por cada 100,000 habitantes, con el año 2021 presentando la tasa más alta.
En 2023, la tasa fue de 6.42 por cada 100,000 habitantes, registrándose un total de 669 suicidios.
Según los psiquiatras las consultas oscilan entre los 3,000 y 5,000 pesos, lo que resulta inaccesible para muchos.
Factores como problemas amorosos, económicos, laborales y familiares han desencadenado un aumento en trastornos depresivos, ansiedad, esquizofrenia y trastorno bipolar, algunos de los cuales pueden llevar al suicidio.
Se estima que los jóvenes entre 15 y 29 años son los más propensos a quitarse la vida, convirtiendo el suicidio en la cuarta causa de muerte a nivel mundial.
A pesar de estas preocupantes cifras, la inversión en salud mental en el país sigue siendo notablemente baja, representando solo el 0.73% del presupuesto nacional, muy por debajo del rango recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que sugiere destinar entre 5% y 10%.
Esto impacta negativamente en la accesibilidad a los servicios de salud mental, retrasando diagnósticos y tratamientos oportunos.
La Sociedad Dominicana de Psiquiatría subraya la necesidad urgente de incrementar la inversión en salud mental en la República Dominicana.
La psiquiatra, Yomaly Almontes indicó que «los pacientes no siempre son llevados a un psiquiatra. La salud mental y general está compuesta por psicología, psicoterapia y psiquiatría. Sin embargo, cuando no se tiene una educación clara sobre los roles, muchas veces el paciente va directamente a un psicólogo o psiquiatra».
Para identificar a cada especialista, Almontes explica:
«En psiquiatría asisten los pacientes que tienen un trastorno, mientras que los de psicología son aquellos que presentan alteraciones en las emociones o problemas emocionales». Esta distinción es crucial para garantizar que los pacientes reciban la atención adecuada.
Estadísticas alarmantes a nivel global y local
A nivel global, la OMS estima que los trastornos mentales, como la ansiedad y la depresión, han aumentado drásticamente durante la pandemia de COVID-19.
Solo en el primer año de la pandemia, los casos de ansiedad aumentaron en un 26% y los de depresión en un 28%. En República Dominicana, los trastornos mentales más comunes incluyen la ansiedad y el TDM, seguidos de la esquizofrenia y el trastorno bipolar.
Asimismo, en relación con el consumo de sustancias, se estima que 292 millones de personas consumieron drogas ilícitas, lo que representa un aumento del 20% en los últimos 10 años. Se estima que 1 de cada 5 jóvenes entre 15 y 24 años ha probado alguna sustancia ilícita.
El consumo de drogas ha mostrado un incremento significativo en los últimos años, con preocupantes estadísticas en relación con varias sustancias. Entre las más consumidas se encuentran el alcohol, la marihuana, la cocaína, el crack y la heroína. lo que añade una presión adicional sobre el ya sobrecargado sistema de salud mental
La SDP subraya que para cubrir adecuadamente las necesidades de salud mental del país, la OMS recomienda contar con 10 psiquiatras por cada 100,000 habitantes. Sin embargo, actualmente, el país cuenta solo con 298 psiquiatras y 43 residentes en formación, muy por debajo del promedio recomendado para una población de 11 millones de personas.
Además, para asegurar una atención adecuada, también se requiere aumentar significativamente el número de psicólogos. Las recomendaciones internacionales sugieren contar con 30 psicólogos por cada 100,000 habitantes, lo que se traduce en la necesidad de 3,300 psicólogo