En América Latina las presiones inflacionarias permanecen elevadas, influenciadas por el incremento significativo en los precios internacionales de las materias primas y las distorsiones en las cadenas de suministros. Esta afirmación la hace el Banco Central en una nota en que explica que para contrarrestar la alta inflación, los bancos centrales de la región han estado implementando planes de normalización monetaria, realizando incrementos a sus tasas de interés de política monetaria (TPM).
Apunta que en República Dominicana, como resultado del proceso de normalización de la política monetaria, el crecimiento de los agregados monetarios se modera significativamente.
Asegura que la actividad económica doméstica mantiene el buen desempeño, al crecer 5.6% entre enero y mayo de este año y que como reflejo de esto, el crédito privado sigue mostrando un alto dinamismo, expandiéndose en torno a 13.0 % al cierre de junio. Sobre el mercado laboral, el BC señala que el empleo se ha recuperado a niveles similares a los registrados previo a la pandemia y se observa una reducción en la tasa de desempleo abierto, hasta alcanzar 6.4% en el primer trimestre de este año.
Destaca que se han fortalecido las reservas internacionales, superando los US$14,400 millones, por encima de lo recomendó por el FMI.