Pensar en Brasil es hacerlo en su carnaval, con bellas mujeres bailando al ritmo de samba y miles de turistas disfrutando de sus playas. En este contexto unos empresarios pensaron en poner en marcha un parque temático dedicado al sexo. ErotikaLand sería el primer parque erótico del país con un área de 150.000 metros cuadrados de superficie reservado solo para mayores de 18 años.
Durante el día el parque sería capaz de albergar a unas 3.000 personas que disfrutarían de originales atracciones como coches de choque con forma de genitales; un «tren fantasma erótico», una rueda de la fortuna donde las sillas son sustituidas por cabinas cerradas; una Playland con juegos eróticos o una piscina nudista donde estaría prohibida la práctica del sexo, como en el resto del parque.
Entre las instalaciones previstas el parque tendría además, un Museo Erótico con una exposición permanente de arte erótico; un Cine 7D con tecnología similar a la ya existe en algunos parques de atracciones del país donde durante la proyección, las sillas y el medio ambiente transmiten los sentimientos de la película a la audiencia, como el calor, el frío o la vibración. Para evitar problemas, el parque contará con, al menos, un hotel donde el usuario puede permanecer por un día o por unas horas.
Previsto para 2018
La idea de los empresarios responsables del proyecto era construir el recinto en Piracicaba a 160 kilómetros de Sao Paulo pero las reticencias locales han parado el parque en busca de una ubicación más favorable.
Según recoge The New York Times, Matheus Erler, miembro del Partido Socialista Cristiano que lidera el Ayuntamiento de Piracicaba señaló que «no podemos ser conocidos como la capital del sexo» mientras que el empresario a cargo del proyecto, Mauro Morata, dejó claro que el parque sería construido fuera de los límites de la ciudad y aseguró que seguirán adelante de todos modos con su búsqueda de un sitio aceptable haciendo hincapié en los aspectos económicos del proyecto que prevé abrir en 2018: 250 nuevos puestos de trabajo y miles de visitantes que pueden pagar cerca de 100 dólares por entrada.