Desde 2011 no se nombraban tan pocos profesionales hispanos para formar parte de juntas directivas de grandes corporaciones estadounidenses. El año pasado solo constituyeron el 4% de los nuevos cargos para los órganos de toma de decisiones, cuatro veces menos que el porcentaje que representan los latinos en este país.
Es «una oportunidad perdida», dice el reporte que incluye el cómputo, a cargo de la firma Heidrick & Struggle, que recluta a ejecutivos. «El porcentaje de los hispanos nombrados en las juntas directivas no ha mejorado en los últimos siete años», escribió Bonnie Gwin, una de las directivas de la compañía.
Además, de los 399 nuevos directores hispanos en consejos de administración en 2015, más de la mitad ya había trabajado en cargos similares o como CEOs en otras firmas.
Entre los CEOs, normalmente el cargo máximo en la ejecución de decisiones en una empresa, solo el 2% es hispano en las 500 mayores empresas cotizadas en la bolsa de Nueva York. Algunos de ellos son Oscar Muñoz, al frente de United Airlines, y Carlos Rodríguez, de Automatic Data Processing.
El estudio asimismo muestra que el número de mujeres nombradas como directoras se ha estancado. Los afroamericanos, con menor representación también, significaron el 9.3% de los nuevos puestos en consejos de administración.