Para mayo del próximo año, ninguno de los trabajadores gubernamentales de Singapur tendrá acceso a internet en la oficina.
La ciudad-Estado cortará el acceso a internet de unas 100.000 computadoras usadas por trabajadores de gobierno, de acuerdo con el Straits Times.
Un memorando está siendo enviado a todas las agencias de gobierno, delineando la nueva política, que será introducida para incrementar la seguridad, de acuerdo con un comunicado de la Autoridad de Desarrollo de Infocomunicaciones (IDA, por sus siglas en inglés).
«El gobierno de Singapur revisa de manera regular nuestras medidas de información tecnológica para hacer nuestra red más segura», dice el comunicado.
«Hemos comenzado a separar el acceso a internet de nuestras estaciones de trabajo a un grupo selecto de servidores públicos y lo haremos para el resto de los servidores públicos durante un periodo de un año».
El Straits Times reportó que los trabajadores todavía podrán entrar a internet desde sus dispositivos privados.
Productividad contra seguridad
Michael Gazeley, director de Network Box y experto en ciberseguridad, dice que no hay forma de hacer a las computadoras completamente seguras, especialmente si todavía funcionan los puertos USB.
«Se puede obviamente mejorar la ciberseguridad de manera significativa al no permitir que las computadoras de conecten a internet. Sin embargo, se puede lograr más protección al tener computadoras especiales, que no tienen conectividad USB, para remover otro vector común de amenaza».
«Esas computadoras también deben estar blindadas internamente, así no se podrá saber qué es lo que está siendo escrito en el teclado», dijo.
Sin embargo, aunque cortar el internet tendría sentido para trabajadores que manejan información sensible, para otros sería una inconveniencia.
«Es típicamente un balance entre la conveniencia y la seguridad. Si todos están desconectados, ¿cómo van a trabajar juntos? Si realizan trabajo, ¿cómo lo van a mover hacia cualquier otra persona? ¿Van a imprimirlo? ¿La impresora es segura? ¿Es seguro el papel?», dijo Gazeley.
Él agregó que si los trabajadores tienen acceso a una intranet, entonces se deben tomar otras medidas para asegurar que no entren a internet desde el mismo dispositivo mientras están fuera de la oficina.
La medida fue criticada en línea como un paso retrógrada que podría llevar a restricciones más amplias contra la libertad en internet en la ciudad-Estado.