El ex presidente de los Estados Unidos Jimmy Carter y su esposa Rosalynn Carter están en el “capítulo final” de sus vidas, según declaró Josh Carter, nieto de la pareja.
«Está claro que estamos en el capítulo final», dijo Josh a la revista People. A la par de explicar que, aunque tengan una «pista de aterrizaje» para despedir a sus abuelos, no hará que sus pérdidas sean más fáciles. Sin embargo, saber que «vivieron sus vidas al máximo» ayuda.
En febrero, el Centro Carter anunció que Jimmy, de 98 años, el presidente estadounidense más longevo, había decidido suspender la intervención médica e ingresar a cuidados paliativos «para pasar el tiempo restante en casa con su familia». Tres meses después, los Carter revelaron que Rosalynn , ahora de 96 años, tiene demencia.
En 2015, el ex presidente se sometió a un tratamiento contra el cáncer después de que se le extirpara una pequeña masa en el hígado, que más tarde se extendió a su cerebro, donde le hallaron cuatro melanomas malignos. Tras someterse a tratamiento, no obstante, los médicos indicaron que, contra todo pronóstico, había quedado libre de cáncer.
Además, sufrió en el pasado varias caídas que limitaron su movilidad, como la que tuvo en 2019 en la que se fracturó la pelvis.
Su nieto comentó que, en la actualidad, sus abuelos tienen una vida tranquila y que siempre hay alguien en la casa para hacerle compañía, con frecuencia uno de sus hijos.
Pero, a pesar de que Jimmy y Rosalynn no son tan activos como solían ser, Josh aclara que todavía están presentes y conscientes de lo que sucede a su alrededor.
En los últimos meses, la familia Carter ha trabajado para estar en paz con lo que venga después. «Lo más probable es que pierda a mi abuelo antes que a mi abuela», dice Josh. «Él está en cuidados paliativos y ella no, y son solo matemáticas», agregó.
