La República Dominicana es un referente económico en América Latina y el Caribe, con un crecimiento promedio de su producto interno bruto (PIB) del 5 %. Sin embargo, seis de cada diez dominicanos trabajan en la informalidad, y la productividad de la economía apenas creció un 0.7 % entre 2010 y 2022.
El Grupo BID publicó su más reciente informe BIDeconomics, bajo el título «República Dominicana: panorama de oportunidades», en el que destaca la resiliencia del país, con indicadores de políticas macroeconómicas prudentes y reformas estructurales que han atraído suficiente inversión extranjera para impulsar sectores como el turismo, la construcción y la manufactura.
No obstante, subraya que persisten brechas que limitan el potencial de los dominicanos.
«Un niño que nace hoy solo será 50 % productivo a los 18 años, debido a las actuales brechas en educación y salud. Aunque se espera que complete 12 años de escolaridad, al ajustar por la calidad del aprendizaje, esta cifra se reduce a menos de 7 años», indica el documento.
De acuerdo con el panorama sectorial de la entidad, la informalidad es alta y la productividad baja, reflejada en el hecho de que la República Dominicana produce el 60 % de lo que produce Estados Unidos con los mismos insumos.
A esto se suma que «gran parte de la población es vulnerable y está expuesta a eventos climáticos. Cuatro de cada diez dominicanos pertenecen a la población vulnerable, lo que los pone en riesgo de caer en la pobreza ante un choque económico o fenómeno natural», agrega el informe.
BIDeconomics es una iniciativa del Grupo BID que ofrece análisis y propuestas para países de Centroamérica, Haití, México, Panamá y la República Dominicana, con el objetivo de identificar oportunidades de desarrollo mediante recomendaciones basadas en prácticas internacionales en áreas como desarrollo humano y productividad.
Sobre el crecimiento del PIB, destacó que el país escaló 17 posiciones a nivel mundial, al pasar del puesto 89 en el 2005 hasta ubicarse en el 72 en el 2022.
El crecimiento económico promedio al 2022 fue de 5.4 % , superando a Costa Rica (3.8 %), Guatemala (3.6 %) y el dato regional de América Latina y el Caribe (2.3 %), según los datos del Banco Central y el Banco Mundial.