El serbio Novak Djokovic, indiscutible número uno mundial, ha ganado todos los títulos posibles… salvo el oro olímpico, y quizás tenga su última oportunidad en Rio, donde la estadounidense Serena Williams tratará de convertirse en la primera tenista en conservar su corona.
El escocés Andy Murray y el español Rafael Nadal se presentan como máximos rivales del serbio en un torneo olímpico muy diezmado, ya que faltará la mitad del Top-10. El suizo Stan Wawrinka (N.4) anunció el martes su renuncia por unos dolores en la espalda, que se suman a las de su compariota Roger Federer (N.3), también lesionado, y a las del canadiense Milos Raonic (N.7), el checo Tomas Berdych (N.8) y el austriaco Dominic Thiem (N.10), los tres por temor al virus del Zika.
La española Garbiñe Muguruza, que ganó este año en la final de Roland Garros a Serena, se presenta como una de las pocas amenazas de la norteamericana, junto a la alemana Angelique Kerber, su verdugo en la pasada final de Australia.
En estas condiciones, del 6 al 14 de agosto, Murray tratará de conservar el oro logrado en Londres-2012, ante Federer, solo cuatro semanas después de haberse impuesto en Wimbledon.
Djokovic, intratable en los dos últimos años, ha ganado 12 títulos del Grand Slam, además del Másters y la Copa Davis, y hasta se colgó una medalla olímpica, el bronce en Pekín-2008, pero le falta el oro. En Londres-2012 fue cuarto, perdiendo la presea ante el argentino Juan Martín del Potro.
La superficie (cemento) elegida por le Federación Internacional (ITF) para la prueba en Rio hacen de Djokovic el gran aspirante al título, una condición que certificó el pasado domingo ganando el Másters 1000 de Toronto, que se disputó en una cancha parecida a la de Rio.
A no ser que Murray, impulsado por su segundo título en Londres, donde el serbio cayó en tercera ronda, sea capaz de defender el oro conquistado hace cuatro años ante su público.
Semanas después Murray ganaría su primer título del Grand Slam, el US Open, disputado en la misma superficie que el torneo olímpico en Rio.
Dudas del estado físico de Nadal y Del Potro
El rendimiento de Nadal es una incógnita, ya que el campeón olímpico en Pekín-2008 no juega un partido oficial desde su retirada en el pasado Roland Garros (a finales de mayo) por unos dolores en la muñeca que no le llevaron a confirmar su participación en el torneo individual hasta este mismo martes.
“La situación (de la muñeca) no es la ideal, pero hemos decidido que voy a jugar”, anunció por la noche ante la prensa Nadal, que además será el abanderado de la delegación española en la ceremonia de apertura del viernes.
Entre los aspirantes a romper el monopolio de los grandes estará el japonés Kei Nishikori, reciente finalista en el Másters 1000 de Toronto, y tampoco hay que olvidar a Del Potro, aunque el argentino arrastra recurrentes problemas físicos que le han llevado a caer en el ranking en los últimos años.
El tandilense, no obstante, jugó el dobles en la eliminatoria de Copa Davis contra Italia, que sirvió a Argentina para clasificarse para las semifinales.
“Me llena de ilusión participar en los Juegos. No soy candidato a medalla, pero en el tenis siempre hay sorpresas”, declaró Del Potro en una conferencia de prensa antes de viajar a Rio. El argentino también jugará el dobles junto a Máximo González.
En la disciplina femenina, la estadounidense Serena Williams, que logró en Wimbledon su 22º torneo del Gran Slam (igualando el récord de la alemana Steffi Graff), será la gran favorita para defender el oro que ya conquistó hace cuatro años, lo que la convertiría en la primera tenista de la historia en tener dos oros olímpicos en la prueba individual.
En Rio, la norteamericana intentará repetir el premio doble de Londres, ya que además de lograr el oro en individual, ganó el título por tercera vez junto a su hermana Venus.
La española Garbiñe Muguruza, que ganó este año en la final de Roland Garros a Serena, se presenta como una de las pocas amenazas de la norteamericana, junto a la alemana Angelique Kerber, su verdugo en la pasada final de Australia.
Garbiñe participará en las tres disciplinas: individual, dobles femeninos, junto a Carla Suárez, y dobles mixtos con Nadal, que también formará pareja con Marc López.
Muchas bajas por miedo al zika
El torneo olímpico está marcado por las numerosas bajas, muchas de ellas motivadas por el miedo de los tenistas al zika: a las ya citadas de Raonic, Berdych y Thiem en el Top-10, se unirán las de los australianos Nick Kyrgios y Bernard Tomic, el español Feliciano López y el sudafricano Kevin Anderson.
En el cuadro femenino también habrá destacadas ausencias, aunque solo la de la rumana Simona Halep (N.5) está directamente relacionada con esta enfermedad.
La rusa Maria Sharapova, vigente subcampeona olímpica, no estará en Rio por su positivo por meldonium a principios de año, y la bielorrusa Victoria Azarenka, bronce en 2012, anunció hace 10 días que está embarazada y puso punto final a la temporada.
Los tenistas rusos podrán participar en el torneo después de que la Federación Internacional de Tenis se pronunciase a favor de ello pese al informe McLaren, que reveló un sistema de dopaje institucionalizado en el deporte ruso.
En lo referente a la participación latinoamericana, exceptuando a Del Potro, la mayor esperanza recaerá en la pareja formada por los brasileños Marcelo Melo, exnúmero uno de la disciplina y ganador de Roland Garros en 2015, y Bruno Soares.
Al no disputarse el torneo en tierra batida, la superficie más habitual en la región, las posibilidades de brillar del uruguayo Pablo Cuevas, del brasileño Thomaz Bellucci, del argentino Federico Delbonis, de la puertorriqueña Mónica Puig, de la colombiana Mariana Duque o de la brasileña Teliana Pereira parecen escasas.