Zara es una niña de Madagascar que tiene ocho años y mide 107 centímetros. Esto es casi 20 centímetros menos que la media global de crecimiento para su edad que establece la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Igual que Zara, millones de niños alrededor del mundo no han podido lograr las metas normales de desarrollo físico.
Se podría pensar que los factores que han atrofiado su crecimiento son la falta de alimento, el entorno en que viven o incluso sus genes.
Pero pocos conocen el impacto que tiene la falta de acceso a agua potable y los sistemas de saneamiento y la forma como éstos tienen un impacto en el desarrollo infantil.
«Como arroz tres veces al día, con pescado», le explica Zara a la organización WaterAid. «Pero el agua es turbia y tiene barro».
Zara vive en Morondava, una aldea en el este de Madagascar. E igual que ocurre en gran parte del país, la defecación en su aldea se realiza por lo general al aire libre.
En su escuela no hay retretes, ni agua potable.
Según un informe publicado por WaterAid, como Zara, 49% de los niños de Madagascar sufre retraso en el crecimiento.
Pero Madagascar no es el país donde este problema es más grave.
India es el país donde más niños -48 millones de menores de cinco años- sufren este trastorno en el mundo, seguido de Nigeria -10,3 millones- y Pakistán, con 9,8 millones.
El informe, titulado «No estar a la altura», afirma que la atrofia en el crecimiento que es una consecuencia de la malnutrición en los primeros dos años de vida de un niño, es casi siempre irreversible y también afecta el desarrollo social y cognitivo del menor.
En Madagascar, una de las profesoras de Zara asegura que entre 70% y 80% de los alumnos de ese colegio sufren malnutrición.
«A veces los niños pierden una semana o un mes de colegio. Muchas veces se duermen en la clase y no son capaces de concentrarse», dice Florine Rabaomirary.
La desnutrición severa y prolongada, que hace que los niños sean más bajos de lo normal para su edad, es causada principalmente por enfermedades transmitidas en agua contaminada o falta de saneamiento.
La organización afirma que cerca de 25% de todos los casos de atrofia en el crecimiento están causados directamente por enfermedades diarreicas en los primeros dos años de vida.
Según WaterAid, 650 millones de personas en el mundo no tienen acceso a agua potable o sistemas de saneamiento.
Y 159 millones de niños menores de cinco años -uno de cada cuatro- tienen retraso en el crecimiento alrededor del mundo.
America Latina
En América Latina, Guatemala es el único país de la región que se encuentra entre las 10 peores naciones del mundo con incidencia en atrofia en el crecimiento infantil.
«Guatemala ocupa el sexto lugar en el mundo entre los países con la prevalencia más alta de atrofia del crecimiento, con 48%», le explica a BBC Mundo Dan Jones, coordinador de nutrición de WaterAid.
Esta cifra, explica el funcionario, es muy alta, comparada con otros países de la región.
En efecto, Ecuador, el país que le sigue, está en el lugar número 59 entre los 100 países con altos índices de atrofia de crecimiento infantil.
Esto que muestra que los problemas de saneamiento que afectan a Guatemala probablemente están teniendo un impacto importante en el trastorno.
«Más de un tercio de la población de Guatemala no tiene acceso a un retrete,lo que significa que las enfermedades diarreicas se propagan rápidamente».
«E incluso cuando un niño tiene suficiente comida, su organismo no es capaz de absorber los nutrientes de estos alimentos debido a los frecuentes ataques de diarrea».
«Es como si el niño no comiera en absoluto», le dice el experto a BBC Mundo.
Tal como afirma el informe de WaterAid, se han logrado muchos progresos en la nutrición infantil en el mundo, pero es claro que todavía falta mucho por hacer en términos de acceso al agua potable y saneamiento.