Se derrumbó un edificio en Tel Aviv: dos muertos y al menos 17 heridos

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Este lunes se derrumbó un edificio en construcción en Ramat HaHayal, un barrio comercial ubicado en el noreste de la ciudad de Tel Aviv, en Israel. Dos personas murieron en el colapso, según confirmó a Infobae el coronel israelí Ariel Blitz, Jefe del Population Preparedness Department (Departamento de Preparación de la Población), en una conferencia de prensa telefónica con medios internacionales.

Además, al menos 17 resultaron heridas –según medios israelíes-, y varias otras quedaron atrapadas, posiblemente entre tres y cinco, aunque Blitz se abstuvo de comunicar un número exacto.

El uniformado indicó que «todas las fuerzas de rescate» están movilizadas para dar con las víctimas y agregó que los servicios de emergencia están preparados para proseguir con las taras de rescate «durante las próximas 24 horas» o «hasta que se haya descartado toda posibilidad de que alguien este todavía» en los escombros.

Por su parte, The Jerusalem Post informó que las víctimas fueron trasladadas a los hospitales Tel Hashomer y Beilinson.

Según explicó a Channel 10 el responsable de bomberos, Lior Teherani, el derrumbe comenzó con el colapso de un aparcamiento subterráneo de varios pisos que se estaba construyendo en el lugar, lo que hizo caer una grúa y provocó a su vez el desplome de parte del edificio.

«Cuando llegué, vi a muchos heridos que estaban todavía conscientes y quesalieron de entre los escombros por sus propios medios», afirmó Moshe Levy, de la organización de socorristas United Hatzalah.

«Mientras algunos miembros de nuestra unidad de ambulancias atendían a los heridos en el lugar, nos avisaron de que había desaparecidos, probablemente atrapados bajo los escombros», agregó.

Un vocero militar indicó a Efe que las autoridades de la ciudad solicitaron apoyo de sus servicios de búsqueda y rescate «para asistir al auxilio y la extracción de civiles» del edificio derrumbado.

Medios israelíes señalaron que a las tareas de rescate se sumaron 120 miembros del Ejército, además de 60 bomberos y efectivos de la Policía, que mantienen acordonada y cerrada al tráfico la zona.

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