El presidente Donald Trump indultó este viernes al exalguacil Joe Arpaio, quien fue hallado culpable por desacatar la orden de un juez de frenar la persecución de inmigrantes indocumentados en el condado de Maricopa en Arizona.
La Casa Blanca hizo el anuncio en medio de la crisis que vive el estado de Texas por el acercamiento del huracán Harvey, que con categoría 4 es el más potente que tocará tierra en EEUU en los últimos 12 años.
«El alguacil Joe Arpaio tiene ahora 85 años y después de más de 50 años de admirable servicio a nuestra nación es un candidato merecedor del perdón presidencial», dice el comunicado de la Casa Blanca, en el que se destaca su amplia trayectoria de servicio como militar, como policía y como agente del antiguo buró antinarcóticos de EEUU, ahora denominado DEA.
Luego en Twitter, Trump llamó a Arpaio un «patriota estadounidense».
«Estoy encantado de informarles que le he concedido un perdón completo al patriota estadounidense de 85 años sheriff Joe Arpaio. ¡Mantuvo a Arizona a salvo!».
Arpaio es un símbolo de los halcones de inmigración por su papel protagonista en la cruzada contra los indocumentados que libraron las autoridades de Arizona hace unos años y que tuvo su momento cumbre con la entrada en vigor de la SB1070, en 2010, una ley que autorizaba a la policía a hacer detenciones de acuerdo al perfil racial de los sospechosos.
El presidente, quien tiene plenos poderes para indultar a estadounidenses condenados a penas de cárcel,había adelantado este martes que lo perdonaría durante un acto proselitista en Phoenix. «Atacaron al alguacil por hacer su trabajo», lamentó ese día el presidente, antes de deslizar que lo indultaría. «Predigo que va a estar bien. No lo voy a hacer hoy porque no quiero causar controversia, está bien. Pero el alguacil Joe se puede sentir bien», adelantó en el Centro de Convenciones de Phoenix.
El sheriff reaccionó el viernes agradeciendo el indulto de Trump.
«Aprecio mucho el perdón que me ha dado el presidente. Muestra cómo apoya a las fuerzas del orden», le dijo Arpaio al diario Arizona Republic.
Arpaio le dijo al diario que se enteró de la noticia por medio de su abogado, que le visitó en su casa de Fountain Hills. El perdón le llegó a Arpaio en el mismo día del cumpleaños de su esposa Ava, a quien el año pasado le fue diagnosticado un cáncer.
Luego Arpaio tuiteó su agradecimiento en una serie de tuits en los que calificó la condena como producto de una «caza de brujas a manos de funcionarios remanentes en el Departamento de Justicia de Obama».
Críticas al indulto
Las críticas al indulto de Arpaio no se hicieron esperar. El exconsejero de la Casa Blanca durante la presidencia de Barack Obama Bob Bauer resaltó en un artículo en Lawfare que generalmente cuando un presidente considera un perdón, solicita antes una recomendación al departamento de Justicia antes de anunciarlo públicamente, un trámite que Trump se ha saltado.
«Se hace muy difícil imaginar que el fiscal general (Jeff) Sessions recomendaría el perdón de un oficial del orden condenado por saltarse una orden de una corte federal de modo intencional y abierto», escribió.
La presidenta del comité de abogados para los derechos civiles, Kristen Clarke, afirmó en su cuenta de Twitter que el indulto supone un «abuso horrendo del poder de perdón que envía un mensaje peligroso de que las fuerzas del orden pueden estar por encima de la ley».
Por su parte, el congresista demócrata por Arizona Raúl Grijalva, aseguró que Arpaio no merece el perdón. «Toda su vida ha actuado con la libertad de estar por encima de la ley. Ahora Trump demuestra que eso es verdad».
«Este perdón es una injusticia», le dijo a Univision Noticias Chuck Coughlin, que fue estratega jefe de la exgobernadora de Arizona Jan Brewer, quien firmó la SB1070. Coughlin, que dirige una consultora de análisis político, ha dicho recientemente que los votantes de Arizona le ha dado la espalda al discurso radical de inmigración.
«Personalmente, me opongo profundamente a esta acción del presidente que aparentemente es un respaldo al perfil racial», añadió Coughlin.
Arpaio debía recibir su sentencia definitiva, que podría ascender hasta seis meses de cárcel, el próximo 5 de octubre. Por su edad, 85 años, también podría haber evitado ir a prisión.
El exalguacil, reconocido por su fuerte oposición a la inmigración indocumentada, estuvo seis periodos consecutivos (24 años) al mando de la agencia policiaca más grande de Arizona, Maricopa, que cubre el área metropolitana de Phoenix.
El caso de Arpaio inició luego de que desacatara en reiteradas ocasiones la orden de un juez de detener los patrullajes de tráfico enfocados en inmigrantes hispanos. Continuó realizándolos durante 18 meses más pese a que fueron considerados como discriminatorios.
La acción de Trump allana el camino de Arpaio para una nueva candidatura política. Hace días, no descartó postularse contra el actual alguacil de Maricopa Paul Penzone, quien lo sustituyó al ganar en las elecciones de noviembre.
«La corte tomó una decisión, el presidente otra, pero la gente tuvo la palabra final en noviembre», afirmó el actual alguacil en un comunicado tras conocer la noticia del perdón.