En un informe de actualización sobre la calificación de riesgo país sobre la región de América Latina y el Caribe, la firma Moody’s revela que República Dominicana mantiene su posición de estabilidad por su robusto crecimiento, menores riesgos externos y la previsión de que este país mantendrá su déficit fiscal bajo control.
El informe de Mood y’s, fechado el 9 de este mes ubica a Belice, República Dominicana, Honduras y a Argentina como los cuatro países que más alcanzaron mejoras en 2017, con respecto a 2016.
Moody’s Investors Service es una agencia de calificación de riesgo que realiza la investigación financiera internacional y el análisis de las entidades comerciales y gubernamentales. La empresa también califica la solvencia de los prestatarios mediante una escala de calificaciones estandarizadas (Wikipedia).
Nota
En un documento de prensa firmado en Nueva York, la firma dice que la perspectiva para la calidad crediticia de los gobiernos de América Latina y el Caribe en 2018 es estable y refleja una mejora en las condiciones crediticias, aunque también evidencia crecientes niveles de endeudamiento e incertidumbre en torno a las elecciones que se llevarán a cabo en varios países este año, señala Moody’s Investors Service en un nuevo informe.
Para 2018, 19 de los 29 gobiernos soberanos latinoamericanos calificados por Moody’s (66%) tienen perspectiva estable, dos (7%) tienen perspectiva positiva, seis (21%) tienen perspectiva negativa y dos (7%) están en revisión para una posible baja de calificación. Las mayores economías de la región, Brasil (Ba2 negativa), México (A3 negativa) y Chile (Aa3 negativa), están incluidas entre los países con perspectiva negativa. El impulso del crecimiento económico que inició en 2017 probablemente continuará en 2018. Las condiciones externas favorables, incluyendo el crecimiento superior al potencial en los Estados Unidos y un mayor crecimiento en China, impulsarán el crecimiento promedio de la región a 2.7%, muy por encima de la tasa anual de 1.9% registrada en 2017 y de 1.4% en 2016. “Sin embargo, la región enfrentará el desafío de elevados niveles de deuda que seguirán en aumento”, dice Ariane Ortiz-Bollin, asistente del vicepresidente de Moody’s. Se espera que los bancos centrales mantengan políticas monetarias acomodaticias, ya que las presiones inflacionarias permanecerán contenidas en la mayoría de los países. Factores políticos domésticos podrían impulsar volatilidad en los mercados financieros. La perspectiva regional incorpora la opinión de Moody’s sobre que el riesgo de la política de los Estados Unidos para la región se concentra, en el corto plazo, a las renegociaciones del TLCAN.
Las recientes elecciones presidenciales en Ecuador, Chile y Honduras, y las próximas elecciones en Colombia, México y Brasil representarán para los nuevos gobiernos desafíos relacionados con mayores demandas sociales y menor disponibilidad de recursos fiscales. La creciente popularidad de los candidatos que prometen cambios políticos profundos amenaza reducir, o incluso revertir, la implementación de políticas y reformas en algunos países. El informe indica que no se espera que las altas tasas de endeudamiento de los gobiernos se reduzcan, dada la caída en ingresos y la rigidez del gasto público. Adicionalmente, las restricciones políticas relacionadas con una apretada agenda electoral probablemente dificultarán los esfuerzos de consolidación fiscal. Sin embargo, Moody’s espera que los indicadores de deuda aumenten solo de forma moderada para la mayoría de los gobiernos soberanos en el transcurso de este año.
