La exestrella infantil ha sufrido estos tipos de eventos en múltiples ocasiones por abuso de drogas y su trastorno de bipolaridad.
La actriz Amanda Bynes fue ingresada de urgencia en un hospital psiquiátrico luego de ser vista, el pasado domingo, deambulando desnuda por las calles de los Ángeles.
Un testigo dijo a TMZ que la misma Amanda llamó al 911 después de hacer señas, detener un vehículo y decirle al conductor que había experimentado un episodio psicótico.
El medio señaló que la mujer de 36 años fue llevada a una estación policial, donde un equipo de profesionales de salud mental dictaminó que la paciente necesitaba una “detención psicológica 5150”,
Detención psicológica 5150 hace referencia al número de la Sección del Código de Bienestar de California con el que una persona puede ser trasladada y retenida de manera involuntaria en un centro psiquiátrico por 72 horas para saber si representa un peligro o está gravemente discapacidad, según Orange Country Health Care Agency.
La exestrella infantil ha sufrido estos tipos de eventos en múltiples ocasiones por abuso de drogas y su trastorno de bipolaridad. Uno de los más recordados fue cuando prendió en llamas la entrada de la casa de su vecino.
Luego de ser arrestada por conducir bajo los efectos de sustancias, la tutela de Amanda estuvo en manos de su madre por casi una década, hasta el año pasado.
Entre 1999 y 2002, Amanda protagonizó la serie de Nickelodeon “El show de Amanda”, donde comenzó haciendo cortes de comedia hasta conseguir su propio programa de televisión.
De 2002 a 2006, también interpretó el papel principal de “Las travesuras de mi hermana”.
En 2002, saltó a la pantalla grande con “Un gran mentiroso” junto a Frankie Muniz y Paul Giamatti.
En 2003 continuó su carrera en el cine con “Lo que una chica quiere” y en 2006 obtuvo un gran personaje de Viola Hastings en “Una chica en apuros” con Channing Matthew Tatum. El largometraje logró recaudar $57 millones.
Fuente-Listin Diario.