El púgil dominicano Lenin Castillo hizo el esfuerzo, pero su objetivo no se concretó en la pelea que por el campeonato mundial del peso semipesado protagonizó con el boxeador ruso Dimitry Bivol. Los tres jueces votaron ampliamente en sus tarjetas a favor del ruso: 119-108, 120-107 y 119-108 para un triunfo por decisión unánime.
Vibol, con un boxeo limpio, salió airoso de manera cómoda sobre el peleador criollo. Y así el peleador de Rusia revalidó su cetro de las 175 libras avalado por la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) en combate montado la la madrugada de este domingo y que tuvo como escenario un coliseo de la ciudad de Chicago, Estados Unidos.-La pelea, transmitida en directo para América Latina y la región del Caribe por la cadena ESPN, no tuvo grandes momentos de emoción. Solo en el sexto round, cuando el ruso mandó al piso al dominicano, se vivió un momento de entusiasmo que alegró a los fanáticos.
Castillo, tras besar la lona, se levantó y recibió de pie los ocho segundos de regla de parte del árbitro. No obstante, el monarca amebeísta, en los siguientes asaltos, continuó su dominio sin problemas el pleito. Ajustó su foja profesional de invicto (17-0). Fue la defensa número ocho de su corona, mientras que Castillo sufrió su tercera derrota con 17 triunfos a su favor.
Castillo no cumplió
Vibol, quien en su pelea más importante logró adueñarse del cetro semipesado de la AMB al derrotar al dominicano Félix Valera, en este combate lució maravilloso, en tanto que Castillo no tuvo momentos de brillo.
En la víspera de la pelea los dos púgiles no tuvieron problemas en la báscula. El quisqueyano pesó 175 libras (marcó el peso justo) en tanto que Vibol bajó de la báscula con un peso de 174.3 libras.
Castillo, quien reside en Puerto Rico, días antes de su serio compromiso manifestó aires de optimismo al declarar textualmente: «Esta es una oportunidad que no debo desperdiciar. Voy en busca de darle a mi país una nueva corona del mundo».
Sin embargo, ya encima del cuadrilátero Castillo no fue ni la sombra de otros combates en los que sí enseñó eficiencia que le dieron el aval para disputar una faja del mundo que no pudo conseguir ante un rival muy superior como Vibol.
