En medio de la tragedia que vive la ciudad de Roseburg, donde un hombre abrió fuego contra los estudiantes del centro Umpqua y dejó 10 muertos, se conoció la heroica historia de Chris Mintz.
Veterano del Ejército de EEUU, este alumno del Community College de Umpqua recibió múltiples disparos al intentar proteger a otros compañeros, según explicó su tía Wanda Mintz a la cadena Fox.
El hombre de 30 años fue trasladado rápidamente a un hospital, donde se le practicaron varias cirugías. Ninguna de las balas afectó a órganos vitales.
Según narraron sus familiares a medios estadounidenses, Mintz intentó bloquear la puerta de acceso a la clase y recibió tres disparos cuando el tirador entró; otros dos más cuando estaba caído en el suelo mientras repetía que era el cumpleaños de su hijo.
Mintz, nacido en Carolina del Norte, se enroló en el Ejército hace una década, cuando terminó la escuela. Fue destinado a Fort Lewis, en el estado de Washington. Después de dejar el servicio militar, se trasladó a Oregon, donde comenzó una nueva vida, narró el diario estadounidense DailyBeast.
El ex militar trabajó, además, en el centro deportivo público YMCA y estaba cursando estudios en Umpqua para convertirse en entrenador profesional.
En la mañana de este viernes, el hospital de Oregon dio información sobre los heridos que fueron trasladados tras el tiroteo, dos de ellos se encuentran en estado estable y se espera que uno abandone el centro médico en las próximas horas. De los supervivientes, cuatro fueron intervenidos por heridas de bala.
Según el relato de sobrevivientes, el atacante preguntaba primero y se paraba frente a los cristianos. «Vas a ver a Dios en un segundo», les decía antes de disparar. Con la investigación abierta, el sheriff del condado de Douglas, John Hanlin, pidió a la gente que evite utilizar el nombre del asesino para no caer en el sensacionalismo. «No quiero glorificar al tirador –dijo-, ni su nombre ni su causa».
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