La nueva referencia dada a conocer por el Banco Central muestra un crecimiento sostenido en sectores esenciales
El cambio de año de referencia de las cuentas nacionales, que toma al 2018 como punto de comparación, confirma que los servicios son el motor principal de la economía dominicana, representando un 62.5% del PIB en ese año, con un crecimiento significativo respecto al 2007 (cuando era 56.9%).
Este cambio resalta la forma en que sectores como el comercio, las actividades inmobiliarias y la construcción han ganado más peso dentro de la economía del país. Además, el crecimiento promedio del PIB real entre 2018 y 2023 se mantiene en 3.4%, igual que con el año base anterior, lo que demuestra la estabilidad del crecimiento económico pese a la pandemia y otros desafíos recientes. Este dato, dado a conocer ayer por el Banco Central (BCRD), reafirma la resiliencia de la economía dominicana y la importancia de actualizar los métodos de medición para reflejar mejor su evolución.
Concretamente, el organismo puso a disposición del público en general y los agentes económicos los resultados del proyecto de cambio de año referencia (PCR) de las cuentas nacionales de la República Dominicana, al establecer el 2018 como nuevo año de referencia del Sistema de Cuentas Nacionales de la República Dominicana.
En este sentido, se divulgan las nuevas series anuales del producto interno bruto (PIB) para los años 2018-2020, como también las series de alta frecuencia del producto interno bruto –PIB- trimestral y del indicador mensual de actividad económica (IMAE) 2018-2024 asociadas a la nueva referencia.
Dichas series se encuentran disponibles en la página web de la institución www.bancentral.gov.do en la sección del sector real de estadísticas económicas, así como una presentación con los principales resultados.
Las cuentas nacionales son un sistema de registros y estadísticas que mide la actividad económica de un país. Incluyen información sobre la producción de bienes y servicios, el ingreso generado, el consumo, las inversiones y otros aspectos clave de la economía. Este sistema permite obtener un panorama claro y detallado de cómo está funcionando la economía en su conjunto, y es fundamental para que el Gobierno, las empresas y los analistas tomen decisiones informadas sobre políticas económicas, inversiones y planificación futura.
Las cuentas nacionales se elaboraron conforme los lineamientos contenidos en el Sistema de Cuentas Nacionales 2008 (SCN2008), manual auspiciado por las Naciones Unidas (NNUU), la Comisión Económica Europea (CEE), la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial.
Para la elaboración la nueva nomenclatura nacional de productos y actividades económicas de la República Dominicana (NNPA), se tomó en cuenta la Clasificación Industrial Internacional Uniforme (CIIU) revisión 4 y la Clasificación Central de Productos (CCP) versión 2.1. Para las estimaciones de las series de indicadores de coyuntura económica PIB trimestral e IMAE, se adoptaron las recomendaciones del Manual de Cuentas Nacionales Trimestrales 2017 del FMI.
El BCRD contó con el acompañamiento de consultores y expertos internacionales avalados por NNUU y con vasta experiencia en misiones de Cuentas Nacionales. La institución recibió también asesoría de expertos en Cuentas Nacionales a través del Centro Regional de Asistencia Técnica de Centroamérica, Panamá y República Dominicana (Captac-DR), dependencia del FMI.
Este cambio de referencia se enmarca en las recomendaciones internacionales que sugieren una actualización periódica de las cuentas nacionales cada 10 años aproximadamente. Esta práctica permite incorporar variaciones en los precios relativos a lo largo del tiempo, nuevas fuentes de información, avances en los procesos tecnológicos, así como los nuevos productos de la economía, lo que refleja las transformaciones en la estructura económica del país. La ejecución del proyecto de cambio de año referencia se sustentó en importantes investigaciones estadísticas, entre las que destacan la actualización de la Encuesta Nacional de Gastos e Ingresos de los Hogares (Engih 2018), el X Censo Nacional de Población y Viviendas 2022, la Encuesta Nacional de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Enmipymes) y otras encuestas sectoriales especializadas.
Asimismo, se contó con fuentes de información detalladas del conglomerado de los sectores productivos: investigaciones exhaustivas de empresas representativas de las actividades económicas del mercado, diversos registros administrativos de empresas y de instituciones públicas, estados financieros y ejecuciones presupuestarias del Gobierno general, estadísticas levantadas y elaboradas por el BCRD (Encuesta de Índice de Precios al Consumidor, Encuesta Nacional Continua de Fuerza de Trabajo ENCFT, Encuesta Turística de Gasto y Motivación, Encuesta Nacional de Salud y Estadísticas del Sector Externo).
Setenta actividades
Los datos del BCRD indican que en esta nueva compilación de referencia se cuenta con cuadros oferta-utilización compuestos de 70 actividades económicas; comparativamente esto representa un nivel de detalle mucho mayor con respecto a las tablas publicadas en la referencia anterior, cuya desegregación era de 35 actividades.
Para la elaboración de la nomenclatura nacional de productos y actividades económicas se tomó en cuenta el grado de relevancia y la disponibilidad de información de cada producto a nivel nacional con el fin de dar seguimiento a aquellos que tengan un peso significativo en la economía dominicana.
Asimismo, las nuevas cuentas nacionales revelan que los servicios han continuado la tendencia que se ha observado en las últimas décadas, de tener mayor incidencia en la economía. Su participación dentro del PIB alcanzó un 62.5 % en el año 2018, lo que representa un cambio de 5.6 puntos porcentuales en comparación con el 2007.
Mayor diversificación de obras de infraestructura
Dentro del sector servicios hubo incrementos en la ponderación dentro del PIB de las actividades de comercio que pasó de 9.1 % en 2007 a 10.9 % en 2018, actividades inmobiliarias y de alquiler (7.7 % a 8.7 %) y otras actividades de servicios de mercado (8.0 % a 8.5 %). La construcción subió su aporte al PIB de 10.4% en 2007 a 11.6% en 2018. Esto se debe a una mayor diversificación en las obras de infraestructura, con mayor participación de proyectos residenciales, lo que fue verificado en investigaciones para el sector, así como mediante levantamientos a las estructuras de costos por tipo de obra y valoración de las edificaciones.