El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, cenó con el magnate mexicano Carlos Slim, quien había criticado las posturas del republicano durante la campaña electoral, confirmó su equipo de transición este lunes.
Trump cenó con Slim el sábado en Mar-a-Lago, su resort en Palm Beach, Florida y describió la velada como una «cena agradable con un hombre maravilloso», reportó el diario The Washington Post, que cita un comunicado del presidente electo.
Una fuente cercana a Trump confirmó la cita en un correo a la AFP.
El encuentro constituye un viraje en la relación entre ambos hombres de negocios, quienes se criticaron mutuamente durante la campaña electora de Estados Unidos.
A mediados de octubre, Trump acusó a Slim, el mayor accionista del diario The New York Times, de montar un complot mediático en su contra encabezado por el periódico, que publicó relatos de mujeres que acusaban al magnate neoyorquino de manosearlas y besarlas años atrás sin su consentimiento.
En su momento, un vocero de Slim dijo que al multimillonario mexicano «no le interesa en lo más mínimo la vida personal» de Trump, pero a pocos días de los comicios lanzó una crítica contra las posturas proteccionistas que llevaron al empresario inmobiliario de 70 años a la Casa Blanca.
Trump ha planteado la posible salida de Estados Unidos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, que integra con México y Canadá, el bloqueo de remesas y la implementación de aranceles.
Slim subrayó que Estados Unidos «importa bienes de consumo de todo el mundo» y si Trump llegara a gravarlas con un impuesto estimado en 35%, «todas las compras aumentan 15% o 20%, destrozaría la economía estadounidense con una inflación brutal».
Pero tras los comicios, Slim, poseedor de la cuarta fortuna mundial, según Forbes, matizó su tono hacia el mandatario electo.
«Si Trump logra hacer crecer la economía estadounidense y los empleos, eso sería fantástico para México», indicó Slim durante su participación en un foro en Ciudad de México, según medios locales.