Dos cazas AF-1B de las Fuerzas Aéreas de Brasil colisionaron durante un entrenamiento militar en la tarde de este 26 de julio, según lo recoge el diario brasileño ‘Folha de Sao Paulo’. Tras el accidente, uno de ellos cayó en el océano, a unos 20 km de la ciudad. El piloto se habría catapultado, pero se desconoce si sobrevivió al accidente. La segunda aeronave logró aterrizar en una base aérea cercana, aunque también presenta daños.
Los aviones accidentados forman parte del escuadrón que controlaría el espacio aéreo durante los Juegos Olímpicos, que iniciarán en diez días. Durante el ejercicio militar, los cazas tenían la misión de ejecutar una nueva formación de ataque en el aire, pero algo salió mal y colisionaron.
La Marina ha abierto una investigación para determinar las causas del accidente. Además, se ejecutó una rápida operación que permitió encontrar el caza caído en las aguas brasileñas. Se informa que estos aviones fueron parte del programa de modernización de 12 cazas ejecutado por el Ministerio de Defensa del Brasil para los Juegos Olímpicos 2016.
Los cazas AF-1B fueron diseñados para las Fuerzas Aéreas de los EE.UU. en la década de 1950 y veinte años después se construyó un modelo final para la Marina de ese país. En 1998, Brasil adquirió 23 de estos cazas a las Fuerzas Armadas de Kuwait. Además de Brasil, las Fuerzas Aéreas de Argentina e Israel poseen estas aeronaves.