El jefe de la aldea Kalempang, Suardi Rosi, indicó al medio indonesio que la víctima, Farida, fue encontrada en el interior de la serpiente el viernes, después de un día de búsqueda desde que desapareció.
La mujer fue al mercado a vender sus productos, pero no volvió a casa esa noche y su marido y otros aldeanos encontraron sus pertenencias cerca de una plantación. Entonces, encontraron a la pitón con un gran bulto en su cuerpo y decidieron abrir la serpiente, en la que encontraron el cadáver.
La pitón reticulada (‘Malayophython reticulatus), es considerada la serpiente más larga del mundo llegando hasta los 8 metros de largo y 250 kilogramos y suele asfixiar a sus víctimas con su cuerpo antes de engullirlas enteras.
La pitón se alimenta sobre todo de roedores, peces y otros reptiles, aunque los ejemplares más grandes también cazan monos, ciervos, jabalíes y hasta leopardos.
Aunque no es común, algunas pitones pueden atacar y engullir un hombre o mujer adultos, como ha ocurrido en algunas ocasiones en Indonesia.
En 2017, un hombre de 27 años fue encontrado muerto en el interior de una pitónen Célebes, mientras que una mujer de 50 años también fue encontrada en 2022 en el interior de otra serpiente en la isla de Sumatra.