El Gobierno español considera que la epidemia de la COVID-19 está en los ‘márgenes de control’ y que el sistema sanitario del país tiene capacidad de reacción ante ‘cualquier rebrote’, dijo este martes el ministro de Sanidad, Salvador Illa.
España tiene uno de los índices de curados más altos del mundo y esta tendencia se consolida, así como el descenso de infectados diarios, destacó hoy Illa en rueda de prensa.
Los curados superan ya los 100.000, informó hoy Sanidad, en tanto que los casos confirmados suman 209.465 hasta ahora según las pruebas PCR.
El objetivo es mantener de manera sostenida el incremento de curados y que los nuevos casos sigan en torno del 1 % diario.
Pero antes de cualquier transición gradual hacia una ‘nueva normalidad’, Illa advirtió de que el sistema tiene que estar preparado para disponer de un número de unidades de cuidados intensivos que sea, como mínimo, el doble que en condiciones normales para enfrentar cualquier eventualidad.
Tanto Illa como el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, valoraron que la gran mayoría de las familias respeteraron el domingo ejemplarmente las reglas para que los menores de 14 años salgan una hora diaria a pasear y jugar acompañados de un solo adulto, normalmente el padre o la madre.
Pero advirtieron contra los incumplimientos por parte de una minoría, como no respetar el tiempo de duración autorizada, el número de adultos o no mantener la distancia de seguridad entre personas, por lo que pidieron ‘responsabilidad’ a la familias.
‘Tenemos que estar muy vigilantes para que no haya este tipo de abusos’, avisó Illa, pues cualquier retroceso en el control de la epidemia retrasará el final paulatino del confinamiento de la población. Será en cualquier caso ‘paso a paso, con mucha prudencia y mucha cautela’, subrayó.