El Estado Islámico planeaba montar células similares a la que perpetró los atentados del pasado 13 de noviembre en París para atacar ese mismo día en Gran Bretaña y Alemania.
Meses previos a los múltiples ataques en la capital francesa, Abdelhamid Abaaoud y Mohamed Abrini, cabecillas del grupo terrorista, se encontraban en Birmingham y Londres.
Según consigna Daily Mail, los yihadistas habrían estado en el Reino Unido por lo menos cinco veces cada uno para preparar a sus reclutas con el objetivo de atentar en la isla el mismo día de los ataques de París.
Una fuente de seguridad explicó a The Sun por qué el Estado Islámico no logró llevar a cabo otra masacre en Gran Bretaña: «La célula terrorista encontró difícil la obtención de explosivos y hallar a un fabricante de bombas confiable en el Reino Unido».
James Clapper, jefe de inteligencia de Estados Unidos, advirtió que ISIS está planeando realizar ataques en el Reino Unido, Alemania e Italia. En esa línea, advirtió de que la libre circulación en la Unión Europea pone en riesgo la seguridad del continente.
El funcionario norteamericano aseguró que algunos extremistas aprovecharon la crisis migratoria para llegar a Europa y exigió un mejor intercambio de información entre los Estados miembros de la UE.
Abrini, detenido por la policía belga 18 días después de los atentados de Bruselas, pasó el verano pasado en Londres, después de viajar desde Siria a través de Estambul.
Abaaoud, en cambio, murió en una incursión de la policía francesa una semana después de los atentados de París.