La posición de Londres como centro financiero global podría verse amenazada si Gran Bretaña vota a favor de abandonar la Unión Europea en un referéndum el 23 de junio, advirtió el Fondo Monetario Internacional.
El organismo global, que fomenta la estabilidad financiera, dijo en un informe que el poderoso sector de servicios financieros de la ciudad podría perder influencia al perder sus derechos de “pasaporte”. Estos derechos permiten a profesionales trabajar en cualquier país de la UE sin solicitar licencias por separado.
Estos derechos son cruciales para Gran Bretaña ya que gran parte de su economía se basa en los servicios financieros, sobre todo contables, bancarios y de asesoría impositiva.
La directora gerente del fondo, Christine Lagarde, dijo que el impacto del llamado Brexit sería grave, hasta el punto de arrastrar al país a una recesión. En ello coincidió con una conclusión del Banco de Inglaterra conocida en la víspera.
“El voto a favor de la salida precipitaría un período prolongado de incertidumbre acentuada, lo que conduciría a la inestabilidad del mercado financiero y un golpe a la producción”, dijo el FMI.
Lagarde defendió la decisión de divulgar las conclusiones del informe frente a críticas de que el FMI se entrometía en asuntos internos del país.
“Lo hacemos, en primer lugar, porque es un riesgo significativo y porque no es un asunto interno”, dijo Lagarde. “Es un asunto internacional. Creo que en los últimos seis meses no he visitado un sólo país del mundo en que no me hayan preguntado cuáles serían las consecuencias económicas del Brexit”.
La salida obligaría a Londres a negociar las condiciones del retiro y una nueva relación con la Unión Europea, un proceso prolongado. AP