Cuba, Irán, China y Siria fueron identificados como los principales censores de internet en el reciente informe anual de la ONG Freedom House, difundido este miércoles.
Pese a las recientes medidas de apertura e incluso al proceso de normalización de relaciones con Estados Unidos, el régimen castrista sigue siendo el único país de América Latina con internet restringido, de acuerdo con el estudio de la organización, con sede en Washington.
Cuba, que emplea cinco de los nueve controles sobre la web medidos por Freedom House, estableció las primeras conexiones públicas Wi-Fi, permitió un tono ligeramente más crítico hacia las autoridades entre los medios de comunicación digitales y redujo a la mitad el costo del acceso público a internet, el cual aún es inaccesible para la mayoría de los cubanos.
Por su parte, Colombia, Ecuador, México y Venezuela fueron ubicados entre los 28 países que garantizan un acceso a la web parcialmente libre.
Argentina y Brasil, en tanto, están entre las 18 naciones con internet libre en el informe anual que comprende a 65 países (siete de América Latina).
China, Siria e Irán son los otros países que fueron incluidos como los principales censores de la web mundial.
Freedom House manifestó su preocupación, ya que es el quinto año consecutivo en que la libertad en internet disminuye. Según la ONG, los gobiernos censuran cada vez más información de interés público, al mismo tiempo que han ampliado su vigilancia y restricción sobre usuarios privados.
El estudio determinó que al menos el 61% de los internautas en el mundo habita en naciones donde críticas al gobierno, las fuerzas armadas o a la élite política han generado censura en línea y al menos el 58% reside en países donde blogueros o usuarios de la tecnología de la información terminaron encarcelados por compartir contenidos políticos, sociales o religiosos.
El informe citó dos casos puntuales. El primero, el de un joven de 18 años que, junto a otras cinco personas, fue arrestado en Venezuela por tuitear sobre la muerte de un congresista. El otro caso es el de María del Rosario Fuente Rubio, quien fue asesinada en el estado fronterizo mexicano de Tamaulipas por manejar cuentas de Twitter y Facebook que reportaban actividad criminal.
Los agresores luego publicaron fotos del cadáver en esa cuenta de Twitter usando el teléfono celular de la víctima.
Freedom House expresó su preocupación ante la posibilidad de que cierta información sea más difícil de hallar después de que un tribunal colombiano obligara a un diario a manipular las etiquetas que describen el contenido de una página web para disminuir las posibilidades de que un artículo periodístico sobre un individuo vinculado con un caso penal aparezca en una búsqueda.
El documento sostuvo que correos electrónicos filtrados al público son «evidencia contundente» de que la policía ecuatoriana de inteligencia trabajó para infectar con malware la cuenta de email de un activista opositor.
infobae