La directora de Pro Consumidor alertó a los adquirientes de motocicletas tomar en cuenta que cuando se compra un vehículo con un préstamo deben reclamar copia de la matrícula –aunque sobre la misma pese una oposición a transferencia antes de saldar el crédito.
La doctora Anina del Castillo dijo que también deben procurar la placa, como parte de la identificación del vehículo y evidencia de que la operación ha sido registrada en la Dirección General de Impuestos Internos (DGII).
Pro Consumidor, en los últimos tres meses, ha posibilitado el cierre de más de una docena de acuerdos entre suplidores y motociclistas, que llevaban largo tiempo –y años en algunos casos- demandando la entrega de matrículas y placas sin resultados.
La situación, colocaba a los motociclistas en circunstancias difíciles, ya que sus medios de transporte no aparecían registrados en la Dirección de Impuestos Internos (DGII) y sufrían frecuentes detenciones por parte de agentes de la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMET).
En el país existen múltiples suplidores de motocicletas ensambladas, algunos de los cuales operan en forma itinerante, que venden estos vehículos a crédito con la promesa de proveer al adquiriente placas y matrículas una vez cumplido el plazo para completar el pago.
Los compradores de motocicletas bajo esta condición se quedaban esperando largo tiempo sin lograr la documentación, porque los suplidores hacían caso omiso a sus reclamos o porque se mudaban de un lugar a otro dentro del territorio nacional.
“Hemos prestado atención a estos casos que afectan a humildes padres de familia, pero que –por otro lado- pueden ser un caldo de cultivo para la delincuencia callejera que se transporta en motocicletas anónimas, difíciles de localizar tras la comisión de un delito”, dijo Del Castillo.