La Alimentación es necesaria en todos los seres vivos, tanto en los animales como en los Seres Humanos, y es por ello que debemos tener una equilibrada incorporación de nutrientes a nuestro organismo, lo que muchas veces es referenciado como Buena Alimentación, siendo fundamental su cumplimiento para el desarrollo de la vida y de las distintas actividades cotidianas.
¿Qué es una buena nutrición?
Una buena alimentación significa que tu cuerpo obtiene todos los nutrientes, vitaminas y minerales que necesita para trabajar correctamente. Para ello debes aprender a planear tus comidas y colaciones inteligentemente, de modo que sean ricos en nutrientes y bajos en calorías.
Se suele vincular justamente a la Buena Alimentación con los deportes, a una vida con ejercicios ya que se suelen adoptar Dietas Equilibradas para poder suplementar estas actividades físicas, mientras que por el contrario los desequilibrios alimenticios suelen relacionarse más bien con una Vida Sedentaria y carente de ejercitación física.
Los malos hábitos alimenticios, han contribuido al aumento de obesidad en el mundo. De acuerdo a la OMS, en 2014, más de 1.9 billones de adultos de 18 años en adelante, sufrían sobre peso. De ellos, más de 600 millones eran obesos. Aún para aquellos con un peso adecuado, una dieta pobre en nutrientes se asocia con mayores riesgos para la salud, que pueden causar enfermedades e incluso la muerte.
Tus decisiones sobre lo que comes afectan tu salud y cómo te sientes hoy, mañana y en el futuro
Una dieta balanceada trae consigo muchos beneficios.
Mucha gente piensa que comer sanamente solo puede ayudar a reducir o mantener el peso, pero los beneficios van más allá.
Aprender a balancear adecuadamente nuestras comidas diarias es necesario porque:
• Nos da la vitalidad y la energía necesarias para la vida.
• Nos ayuda a mantener un peso adecuado, de acuerdo a la edad y estatura.
• Estimula el sistema inmunológico.
• Mejora el desempeño deportivo y en general, en cualquier actividad que realicemos.
• Retrasa el proceso de envejecimiento.
• Nos permite estar activos y en forma durante la vejez.
• Ayuda a combatir el cansancio y la fatiga.
• Protege los dientes y mantiene sanas las encías.
• Mejora la habilidad de concentración y los posibles cambios de humor.
• Reduce el riesgo de contraer enfermedades graves como ataques al corazón, ciertos tipos de cáncer, diabetes en la edad madura y enfermedades de la vesícula biliar, entre otras.
Los básicos para una alimentación sana.
• Bajo en grasa
Los nutriólogos coinciden en que comer menos grasas saturadas, en alimentos fritos, mantequilla, crema, margarina y aceites es una forma de hacer llevar una dieta saludable y la bajar de peso. Disminuir el consumo es en particular, importante para el corazón.
• Carbohidratos y almidones
Hemos olvidado lo importante que son el arroz, la pasta, las papas, el pan y los cereales para nuestra salud. Anteriormente se creía que el almidón era dañino, pero hoy se sabe que puede llegar a ser tan importante en una dieta adecuada, como la fibra.
• Alto contenido de fibra
Aunque a veces no nos guste, la fibra mantiene nuestro aparato digestivo en movimiento y ayuda a bajar el colesterol, a prevenir los cálculos biliares, el cáncer de intestino y a mantener nuestro peso bajo control. La fibra se encuentra en cereales, en arroz integral, cebada, lentejas, frijoles y verduras.
• Vitaminas, minerales y antioxidantes
Las verduras, frutas y granos contienen una gran cantidad de vitaminas y minerales que funcionan como antioxidantes. Numerosos estudios muestran que las personas que comen muchas legumbres y frutas tienen tasas más bajas de enfermedades del corazón y cáncer.
• Consumo moderado de azúcar
El azúcar en cantidades modestas añade sabor y es un combustible útil para las personas activas. Sin embargo, consumirla en exceso agrega kilojules no deseados y puede desplazar otros alimentos más importantes. En forma masticable, el azúcar también puede causar caries. .
• Poca sal
La dieta moderna está cargado de sal y esto es perjudicial para el corazón. El 75% de la ingesta total de sal proviene de alimentos comerciales cotidianos; por lo tanto es imperativo comprar productos de sal reducida o sin sal agregada.
Al decidir cambiar hábitos y tomar medidas para comer mejor, estarás facilitando a tu cuerpo los nutrientes que necesita para mantenerse sano, activo y fuerte. Hacer pequeñas modificaciones en tu dieta es más sencillo de lo que te imaginas. Lo importante siempre es documentarte adecuadamente y acercarte a un experto para evitar descompensaciones que a la larga resulten peor.