La novia del responsable de la masacre de Las Vegas, que dejó 58 muertos, dijo este miércoles que desconocía los planes de su pareja de disparar contra una multitud.
«Conocí un Stephen Paddock bondadoso, cariñoso y tranquilo«, dijo Marilou Danley en un comunicado leído por su abogado. «Nunca me dijo nada o hizo alguna acción que me alertara que algo horrible como esto pudiera pasar».
Tres días después de que Stephen Paddock matara a 58 personas e hiriera a más de 500 en pleno centro de la meca del juego y el entretenimiento, Marilou Danley, de 62 años, volvió a Estados Unidos desde su natal Filipinas, donde pasaba unos días de vacaciones con un billete que su pareja le compró.
Marilou Danley hizo las declaraciones a la prensa estadounidense tres días después de que Stephen Paddock matara a 58 personas e hiriera a más de 500 en pleno centro de la meca del juego y el entretenimiento. De regreso de Filipinas, fue interrogada durante varias horas por los agentes del FBI que están al frente de la investigación.
Danley, de 62 años, explicó que hace dos semanas, Paddock le dijo que había comprado un boleto de avión para que fuera a visitar a su familia en Filipinas.
«Como todos los filipinos en el extranjero, estaba emocionada de ir a casa a ver a familiares y amigos» y «mientras estaba allá me envió dinero, que dijo era para que comprara una casa para mi y mi familia», indicó en referencia a la transferencia de 100.000 dólares recibida por ella durante el viaje.
Según ella, la actitud de su pareja le hizo sospechar que quizás esa actitud respondía a que buscaba terminar la relación.
«Nunca se me ocurrió de ninguna manera que estuviera planeando algo violento contra nadie», dijo.
El miércoles, sus hermanas habían declarado que Marilou Danley había sido sacada del país» por su novio sorpresivamente días antes del ataque «para no interferir con los planes».
La mujer, que tiene nacionalidad australiana y vive en Estados Unidos desde hace 22 años,aseguró que quedó devastada al conocer la noticia de la matanza, la peor en la historia reciente del país, y envió sus condolencias a los familiares de las víctimas.
«Soy una madre y una abuela y mi corazón sufre por todos aquellos que perdieron un ser querido», expresó la mujer, que aseguró que volvió voluntariamente a Estados Unidos y colaborará con el FBI en la investigación.