El guardabosques dominicano Manny Ramírez y el receptor puertorriqueño Iván Rodríguez están por primera vez incluidos en la votación del Salón de la Fama de las Grandes Ligas, junto con otros seis jugadores latinoamericanos, incluido el guardabosques dominicano Vladimir Guerrero.
Eso en realidad no es novedad si se tiene en cuenta la gran calidad que ambos peloteros demostraron en el diamante durante su brillante carrera profesional.
Pero el nombramiento de Ramírez y Rodríguez se da por primera vez después de que ambos estuvieron relacionados con el uso de sustancias prohibidas por las Grandes Ligas.
Ramírez fue suspendido 50 juegos en el 2009 cuando jugaba para los Dodgers de Los Ángeles por usar una droga de fertilidad femenina prohibida.
El dominicano se retiró en 2011 para no enfrentar una segunda suspensión, esa vez de 100 partidos, después de dar positivo a una sustancia que mejora el rendimiento.
Rodríguez nunca fue sancionado por uso de sustancias prohibidas, pero su excompañero de equipo en los Vigilantes de Texas, el cubano José Canseco, en su libro publicado en el 2005, asegura que inyectó esteroides al receptor.
Tanto Ramírez como Rodríguez se unen a Roger Clemens y Barry Bonds, en las boletas de selección, como los otros dos jugadores en quienes también pesan acusaciones de usar esteroides. Clemens y Bonds están en la boleta por quinta vez.
Después de que un cambio en las reglas de ser elegibles de votación en la que se eliminó a algunos escritores jubilados, Clemens subió a 45,2 por ciento y Bonds a 44,3 por ciento en la votación del año pasado.
Los jugadores permanecen en la boleta por un máximo de 10 años, siempre y cuando reciban al menos el 5 por ciento de los votos.
Ahora habrá que ver si Ramírez y Rodríguez también van a beneficiarse de las nuevas ideas que hay con relación a la votación, donde ya no prima tanto la pureza del deportes sino que el profesional haya sido importante en el desarrollo del juego por sus aportaciones.
Guerrero fue nueve veces Jugador del Partido de las Estrella y fue nombrado Jugador Más Valioso (MVP) de la Liga Americana en el 2004 cuando jugaba para los Angelinos de Anaheim.
El dominicano pegó para promedio de .318 con 449 jonrones y 1.496 carreras impulsadas en 16 temporadas de Grandes Ligas.
Entre los otros jugadores latinoamericanos también nombrados por primera vez se encuentran el parador en corto colombiano Orlando Cabrera, los venezolanos el segunda base Carlos Guillén, el antesalista Melvin Mora, el guardabosques Magglio Ordóñez, y el receptor puertorriqueño Jorge Posada.
También se encuentran Casey Blake, Pat Burrell, Mike Cameron, JD Drew, Derrek Lee, Arthur Rhodes, Freddy Sánchez, Matt Stairs, Jason Varitek, Billy Wagner y Tim Wakefield.
