El administrador general del Bagrícola, Carlos Segura Foster, destacó que el país tiene grandes oportunidades para exportar cultivos no tradicionales, entre los que mencionó la pitahaya, el aguacate y la guanábana.
Segura Foster destacó que existen 10 proyectos de producción de pitahaya en las provincias de Baoruco y Barahona, en especial en Boca de Cachón, cerca del lago Enriquillo.
Indicó que en la última visita sorpresa del Presidente a Vicente Noble, personas que producían dos mil unidades de pitahaya pasaron a producir seis mil. “La pitahaya empieza a producir en pequeña proporción a los seis meses y entran en producción plena a los dos años, y tenemos plantaciones desde Vicente Noble hasta Canoa que tienen verdaderas empresas que están produciéndose”, expresó.
Segura Foster entiende que se puede multiplicar por 200 la producción actual, tanto para consumo local como para exportar.
Expresó que es un cultivo que no necesita de mucha agua, porque es un cactus, aunque al principio tiene un costo de inversión alto. Expresó que la pitahaya tiene diferentes colores, incluso hay opiniones que dicen que tiene propiedades afrodisíacas.
Expuso que en Vietnam y Perú existen plantas de pitahaya que tienen seis generaciones. Pero la ventaja de producirla en el país es que las condiciones climáticas del trópico le permiten mejor sabor a los frutos.
Destacó que el Bagrícola ha diversificado la cartera de financiamiento. “podemos decir con orgullo que estamos financiando todos los renglones que están conectados con la agropecuaria, incluyendo la producción de madera a largo plazo”.
Entre los productos que tienen préstamos formalizados se encuentran: arroz, aguacate, ají, café, cacao y habichuelas.
