La lectura comprensiva es una herramienta que estimula la comunicación oral entre la familia, así lo considera el novelista Carlos Fong, quien como parte del programa educativo que desarrolla el Museo de Arte Contemporáneo (MAC), a la par de las exposiciones dedicadas a China, dictará ‘Puro Cuento Chino: taller para contar cuentos en familia’.
Fong, enfocado en analizar y dar a conocer la lectura como herramienta de comprensión y cambio social, asegura que ‘leer en la familia puede crear la posibilidad de rescatar el valor social de la palabra’.
La lectura, según explica el ganador del premio Sagitario Ediciones de Novela Corta 2015-2016, promueve la unidad familiar. ‘Un personaje de un cuento puede pasar por algo que de pronto nos recordó algo. Eso es volver a conversar sobre lo que tenemos en común’, afirma.
Asegurar que la literatura educa y hace mejores a las personas es un poco arriesgado, ‘es más creo que una persona puede tener mucha cultura, tener muchos libros y ser un terrorista o alguien que hace el mal; o todo lo contrario, un filántropo o un gran humanista, un artista’, señala Fong.
Y es que la lectura opera en las personas de distintas formas. ‘Mientras más leemos, tenemos una idea menos estrecha del mundo y somos menos vulnerables a ser gobernados por tiranos o por los poderes institucionalizados’, asegura Fong.
Agrega que ‘leer te hace ser irreverente, pero esta irreverencia es inteligente. Un chico violento que le hace la vida de cuadritos a sus padres puede encontrar muchas respuestas en un libro y descubrir que la violencia no era un buen asesor’.
BENEFICIOS INVALUABLES
La mayoría de las veces cuando se piensa en los beneficios de la literatura se evocan palabras como imaginación, conocimiento, información, entre otras.
Incluso se puede ir más allá y volverse poeta con afirmaciones metafóricas como ‘leer te hará libre’ o ‘leer es un viaje; todo esto está bien’.
‘Yo pienso en la literatura como una forma de encontrarme con el otro, una posibilidad de poder pensar en la felicidad o los problemas de los otros y que muchas veces esos problemas o alegrías se parecen a las mías. Cuando leemos ficciones llenamos vacíos y nos hacemos ilusiones, pero esas ilusiones tienen un campo de operación en la realidad que nos ayuda a entender mejor esa misma realidad’, detalla Fong.
En cuanto a las temáticas recomendadas en las diferentes etapas de la vida, el fundador y director de la Red Panameña de Narradores de Historias no cree en que haya para chicos o temas para grandes.
‘Hay libros de cuentos para niños con temas inquietantes y escabrosos: la guerra, el divorcio, la muerte… y un libro de adultos puede tener tanta ternura como un cuento infantil. Lo que sucede es que van a encontrar los temas de la vida tratados de distintas formas para niños y jóvenes’, dice.
El autor de las colecciones de cuento Desde el otro lado y Fragmentos de un naufragio recomienda a los padres ir ‘con sus hijos a una librería, a una feria, y vean libros juntos, que exploren, que se atrevan a leer algo juntos y discutirlo si es necesario, o que cada uno lea en soledad, cada uno por su lado, y se haga las preguntas que quiera a sí mismo’.
RECOMENDACIONES
¿A qué edad se debe incursionar en la literatura?
Carlos Fong, animador sociocultural, ensayista y narrador oral panameño, afirma que ‘estaría bien hacerlo desde que la cría está en la panza. Las mujeres embarazadas al cantar rondas, cancioncillas, coplas, canciones de cuna, poemas infantiles le transmiten a su hijo la musicalidad del mundo a través de las palabras. Después vienen los primeros años de la infancia que también son importantes. El niño aún no lee, pero simula hacerlo porque lo hacen sus padres. Pero yo creo que cualquier edad es buena para un encuentro con la lectura. No soy de los promotores de lectura que cree que todo el mundo debe ser un lector, ni siquiera los estudiantes. La lectura no ha venido para eso. Es como si quisiéramos que todo el mundo fuera cantante o músico. Basta con tener una experiencia con la lectura que te ayude a tomar decisiones en la vida’.
