Políticos, celebridades, actores, gente rica: todos están en la lista de los potenciales pacientes que pueden terminar padeciendo el llamado síndrome VIP. Según la revista especializada Chest Journal, del Colegio Estadounidense de Cirujanos del Tórax, es lo ocurre cuando una persona muy importante (VIP) es admitida en un centro de atención médica y su relevancia pública afecta las decisiones sobre la atención médica. Desde un exceso de pruebas diagnósticas o lo contrario, una exploración médica menos minuciosa, hasta la prescripción errónea de medicamentos producto de la presión que el VIP puede ejercer sobre el personal médico. «Las desviaciones de la atención estándar a menudo resultan en catástrofes imprevistas», asegura el profesor Jay Block, de la Universidad de Florida en un artículo sobre este tema. En este video explicamos más sobre este síndrome y qué está pasando con el tratamiento para combatir el coronavirus que recibe el presidente Donald Trump.
