«Esta noche lamento decir que la senda se ha cerrado, dejamos todo en el campo de Indiana. Dimos todo lo que teníamos, pero los votantes eligieron a otro. Con el corazón roto pero con optimismo en el futuro de la nación, suspendemos la campaña», declaró Ted Cruz.
El senador por Texas advirtió, sin embargo, que no está suspendiendo la lucha para defender la Constitución. «Nuestro movimiento seguirá. Y les doy mi palabra que seguiré defendiéndolos con todas mis fuerzas. Juntos vamos a seguir mientras Dios nos de la fortaleza», agregó.
TRUMP YA CUENTA CON 1.035 DE LOS 1.237 DELEGADOS QUE NECESITA PARA OBTENER LA NOMINACIÓN REPUBLICANA
El republicano anunció su retirada en un discurso televisado desde Indianápolis (Indiana) ante un grupo se seguidores y dejó solos en la carrera al magnate y al senador de Ohio, John Kasich, quien realmente no tiene chances de lograr la nominación. Es que sólo tiene 153 delegados mientras que Trump ya cuenta con 1.035 de los 1.237 que necesita para obtener la nominación republicana, de acuerdo con estimaciones de CNN.
Ted Cruz había concentrado en Indiana su último gran esfuerzo en una verdadera «campaña anti-Trump», que trataba de evitar una nueva victoria del multimillonario neoyorquino y propiciar así en julio una convención republicana disputada en la que ningún aspirante cuente con todos los delegados necesarios para lograr la nominación.
De hecho, el senador por Texas se volcó a este estada con especial intensidad (sólo el lunes llegó a dar alrededor de una decena de discursos allí) y los grupos de la campaña anti-Trump (de tendencia conservadora, pero alejados de los posicionamientos del magnate) se dejaron millones de dólares en anuncios televisivos críticos con su figura.
Sin embargo, todos estos esfuerzos no impidieron que Trump lograra una amplia victoriaen esta zona que, por sus características socioeconómicas, se le está dando especialmente bien al magnate, que también ganó en Illinois, Michigan y Pensilvania