Triples desde casi el medio campo, tapones, asistencias y un pabellón a sus pies… Victor Wembanyama respondió a las desorbitadas expectativas y llevó en volandas a los San Antonio Spurs hasta el triunfo (140-110) ante Indiana Pacers, este jueves en un duelo de la NBA en París.
«¡Les queremos dar un máximo de placer y un máximo de espectáculo!», prometió el prodigio de 21 años y 2,24 metros con el micrófono en la mano justo antes de comenzar el primero de los dos ‘Paris Games 2025’ entre ambos equipos. Indiana jugará por la revancha el sábado.
De las lágrimas olímpicas tras perder el oro ante el ‘Team USA’ a una reconfortante exhibición unos meses después ante su gente en el mismo parqué de Bercy.
‘Wemby’ firmó 30 puntos, 11 rebotes, seis asistencias y cinco tapones en 30 minutos. Una hoja de servicios perfecta, pero sobre todo dejó un puñado de esas jugadas por la que es considerado lo nunca visto en la historia del básquet.
«El de hoy fue uno de los partidos que más me llegó al corazón. Y en términos de mi rendimiento, uno de mis cinco mejores», afirmó Wembanyama al término del encuentro.
«Esto significa todo para mí. Es una locura ver al público así. Esta noche ha sido algo diferente, el apoyo de la gente fue total e intenté aprovechar su apoyo, eso lo hizo más fácil», apuntó.
«Un alien», lo definió Lebron James cuando ni siquiera había debutado en la NBA: un gigante que bota como un base, tira como un alero y se mueve como un bailarín.
Consagrado ya como una de las grandes figuras de la gran liga en su segundo año, ‘Wemby’ tenía subrayada la visita a su país.
– Una previa ajetreada –
Aterrizado el lunes, la previa había sido ajetreada: visita a su ciudad Chesnay -afueras de París– para inaugurar dos canchas, presencia en el desfile de Louis Vuitton y en el Parque de los Príncipes para el PSG-Manchester City con unos talentosos toques al balón en el descanso.
El que fuera portero de fútbol no se resintió cuando llegó la hora de volver a tocar el balón naranja ante los 15.900 espectadores que llenaron Bercy.
Tras un primer tiempo muy equilibrado (60-57), los Spurs se dispararon en el tercer cuarto (ganado por 45-23) y ‘Wemby’ se retiró al banquillo a falta cinco minutos y medio, con 24 de ventaja, y recibiendo gritos de «¡MVP, MVP!».
Al pívot francés le acompañaron en la anotación Devin Vassell con 25 puntos y el veterano Harrison Barnes con 20.
Por los Pacers, que no contaron con la mejor versión de su estrella Tyrese Haliburton (13 puntos), lideraron la anotación el canadiense Bennedict Matturin con 24 y el camerunés Paskal Siakam, que aportó 18.
Siguieron el duelo desde la primera fila un nutrido grupo de grandes nombres del básquet, entre ellos los miembros del Salón de la Fama Oscar Robertson, Pau Gasol, Manu Ginóbili, David Robinson y el ídolo local Tony Parker, ovacionados tras saltar a la pista en un tiempo muerto.
– Silver: ‘Muy abierto al mundo’ –
También figuras del fútbol, como el Balón de Oro Rodri, el trío del Barcelona Pedri, Eric García y Ferran Torres o un grupo del PSG, liderado por Achraf Hakimi y Ousmane Dembele, con la satisfacción de haber remontado al City (4-2) un día antes.
Antes del partido había tomado la palabra en Bercy ante la prensa el comisionado de la NBA Adam Silver, consciente del diamante que tiene para seguir haciendo crecer a su producto en una época en la que James, Stephen Curry y Kevin Durant están en su ocaso.
«Es curioso y culto, muy abierto al mundo. Es una persona única, que sobresale en el básquet pero está conectado con otras personas debido a sus múltiples facetas y a su largo abanico de intereses. Hace nuestro trabajo más fácil», reconoció sobre la ‘rara avis’ de la NBA.
Su técnico Mitch Johnson, sustituto temporal del mítico Gregg Popovich -de baja por enfermedad-, había vaticinado el ‘show’ de su chico en la rueda de prensa previa.
«Tiene la oportunidad de conectar con la ciudad más que en los Juegos Olímpicos», dijo.
El sábado (17h00 GMT) en el mismo escenario ‘Wemby’ tendrá la oportunidad de despedirse a lo grande de los suyos.
