Brasil, Venezuela, Argentina: qué pasa con esos mercados emergentes en 2016

369
0
Compartir
Dilma Rousseff, Nicolás Maduro y Mauricio Macri

En su evaluación del desempeño de los mercados emergentes, la consultora Exotix Partners, especialista en inversiones internacionales con sede en Gran Bretaña, destacó que 2015 ha sido un año difícil para las inversiones fijas en ellos: «El tercer año más débil desde la crisis financiera global». Y en su pronóstico sobre temas de importancia para los mercados emergentes o fronterizos, destacó cinco, tres de los cuales se ocupan directamente de América Latina: Brasil,Venezuela y Argentina. El cuarto, el precio del petróleo, afecta a esas y otras economías de la región, como Ecuador, Bolivia y Colombia. El quinto tema es África.

El informe de Exotix Partners fue realizado por el investigador principal Stuart Culverhouse y otros analistas: Alan Cameron, Nashwa Saleh y Francisco Velasco. El director editorial es Gavin Serkin, creador de Frontier Funds y autor del libro Frontier, una exploración de los diez mercados emergentes más importantes del porvenir.

Brasil: entre Petrobras y el impeachment

«Creemos que un gran tema para los mercados emergentes en 2016 será Brasil, y por extensión Petrobras y los bancos», opinaron los autores del informe. «Creemos que las cosas seguirán siendo desafiantes el próximo año».

Se conocen mucho el deterioro económico, la parálisis política y los escándalos de corrupción, «pero ahora están cada vez más interconectados». El escándalo de Petrobras lleva ya dos años, el país enfrenta una recesión profunda y la inflación supera el 10 por ciento. El déficit fiscal y de cuenta corriente son los mayores entre las economías más grandes de los mercados emergentes. El real se devaluó un 30% contra el dólar (en general, la moneda de los mercados emergentes cayó en un 15%) y la presidente Dilma Rousseff enfrenta la posibilidad delimpeachment. «No creemos que las cosas mejorarán hasta que haya una solución política a lo que en realidad es una crisis fiscal (y de gobierno)».

La pretrolera brasileña Petrobras, en la mira por corrupción

Según el texto, «Petrobras será otra vez uno de los temas principales para los inversores en mercados emergentes en 2016». La razón: «Los factores macroeconómicos y políticos pueden ejercer una influencia muy fuerte sobre el ambiente operativo de Petrobras y sus bonos». El punto más importante para los inversores, evaluó Exotix Partners, «será si Petrobras logra un progreso visible en su estrategia de desapalancamiento». El desendeudamiento dependerá de los beneficios del negocio principal de la empresa, su capacidad de monetizar sus activos y el acceso a fuentes de financiación baratas.

«Con la fuerte contracción del PBI, el desempleo en aumento, la inflación por encima de lo esperado y el salario real en caída, el gobierno sería muy impopular si apoyara aumentos en los precios de los productos derivados del petróleo», se advirtió. «Por otro lado, la inercia de la inflación alta puede facilitar que Petrobras busque incrementos graduales en el tiempo (pues serán menos obvios cuando otros precios de la economía también aumenten)».

Venezuela: ¿rumbo al default?

El capítulo sobre Venezuela empieza sin sutilezas: «¿Se puede evitar la cesación de pagos?». La consultora se preguntó por el efecto de la baja continua de los precios del petróleo «mientras se espera el impacto (positivo o negativo) de la victoria significativa de la oposición en las elecciones parlamentarias recientes».

Los analistas financieros estimaron que la probabilidad de la cesación de pagos puede aumentar, a falta de visibilidad de fuentes de financiación, «en tanto continúa la inacción política y no se realiza un ajuste económico en vista de los precios bajos del petróleo». El último tambaleo de esos valores «meramente se suma a este riesgo creciente de cesación de pagos».

La perspectiva de 2016 es muy incierta, se lee, por varias razones. Los desequilibrios externos continuarán, y dado el bajo precio del petróleo «el actual déficit de cuenta corriente aumenta a casi USD 12.000 millones, comparado con nuestra previsión de abril, que era de USD 1.300 millones». El cálculo de la consultora ubicaba las necesidades financieras brutas del gobierno de Nicolás Maduro para 2016 en USD 23.000 millones, «pero esto podría aumentarlas a más de USD 30.000 millones: ¿cómo lo va a manejar Venezuela? (…) El riesgo de una crisis de la balanza de pagos (simplemente, quedarse sin dinero) aumenta. Se necesita acción, con urgencia».

La opositora MUD se impuso en las elecciones parlamentarias de Venezuela

A partir de las elecciones parlamentarias que dieron a la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) 109 lugares (que con los tres escaños indígenas habilita una supermayoría) de los 167 de la Asamblea Nacional que asume el 6 de enero, Exotix Partners encontraron alguna base para el optimismo. «El futuro lucirá mejor si el gobierno y la oposición pueden trabajar juntos constructivamente. Pero todavía no sabemos cómo responderán el presidente Maduro y el chavismo. Maduro puede no durar todo 2016, lo cual llevaría a un riesgo político mayor. Tampoco sabemos cómo elegirá la oposición ejercer su nuevo poder. Si eligen concentrarse ensacar a Maduro, bien por impeachment o bien por un referendum, a costa de tratar de abordar los problemas económicos y sociales, pueden perder apoyo dentro de su coalición diversa».

Argentina: tipo de cambio y bonos

En el capítulo sobre la Argentina, titulado «La normalización ha comenzado», se señaló: «Esperamos que la elección de [Mauricio] Macri marcará un cambio tanto en las políticas como en el enfoque, que se aleje del estilo confrontativo que se vio bajo el kirchnerismo. Se lo ve pro-comercio y favorable al mercado, pero, no obstante, deshacer los desequilibrios económicos que se crearon durante doce años de kirchnerismo, y tratar con un Congreso dominado por el peronismo no será fácil».

Tras enumerar los nombramientos principales en el Ministerio de Economía, el Banco Central, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) y la embajada en los Estados Unidos, los analistas evaluaron: «Es un equipo fuerte y creíble, desde nuestra perspectiva». Comenzaron entonces el análisis del «proceso de normalización» que dan por iniciado: «El gobierno —como había prometido— quitó los controles de cambio el 17 de diciembre, quizá su primera gran decisión política. Esto hizo que el peso cayera casi 30% (…) Vemos la acción sobre el cambio como un paso necesario y positivo para afrontar los desequilibrios económicos del país». En la imagen general, es una manifestación clara de que «Macri es serio sobre la necesidad de un ajuste económico, y la lección que los estrategas políticos dirán es que conviene hacer los cambios duros temprano, y se puede culpar al gobierno anterior por haber tenido que hacerlos».

Desde el punto de vista de los inversores en bonos, se argumentó en el informe, «quizá los temas más importantes son asegurar nueva financiación externa y resolver la situación con los holdouts» [los tenedores de bonos que no aceptaron los procesos de reestructuración lanzados por el kirchnerismo].

Sobre el primer punto, Exotix Partners desarrolló: «Creemos que reconstruir las reservas es una parte esencial del proceso de liberalización del cambio, para poder sostener el ajuste de la tasa de cambio». Sobre el segundo, «la saga de los holdouts», formuló: «El gran tema es cuándo (y presumimos que es una cuestión de cuándo, no de si) comenzarán las negociaciones por un acuerdo con los holdouts. Según los medios, [el secretario de Finanzas Luis] Caputo ya habló con el Special Master (el mediador designado por los tribunales en Nueva York): al equipo de Macri le tomó unos pocos días hacer lo que Néstor Kirchner y Cristina Kirchner se negaron a hacer por más de diez años». Los consultores se manifestaron optimistas sobre la posibilidad de que se llegue a un acuerdo en 2016.

Por último, el informe analizó el sector del petróleo, con YPF como centro. «Bajo la presidencia de Macri, se esperan mejoras en el marco regulatorio y la estructura impositiva en varios sectores, de modo notable en servicios y en el campo, áreas en las que ya hubo anuncios específicos. Nos resulta menos claro en el sector del petróleo y el gas, ya que últimamente se ha beneficiado de precios por encima de las paritarias internacionales para el crudo y de incentivos para aumentos en la producción de gas natural, que serán revisados por el nuevo gobierno».

Adrián Escandar

Según el texto, el sector de petróleo y gas tendrá importancia para el gobierno, y por eso estimó que «las políticas y las regulaciones estarán más cerca de lo que han sido luego de la nacionalización de YPF que de lo que eran antes de ese hecho, o de lo que eran en la década de 1990 (liberalización con precios que convergían con los internacionales)».

En el caso de YPF, «una compañía de integración vertical que refina y vende productos del petróleo en el mercado interno», la devaluación en sí produjo una reducción del ingreso de la compañía en dólares, lo cual importa porque el 75% de la deuda de YPF es en divisas. Dado que el Ministerio de Energía se comprometió a trabajar para que no haya un aumento de precios por tres meses, la devaluación afecta negativamente a YPF en el corto plazo. «Sin embargo, en el mediano plazo, un tipo de cambio equilibrado presenta una opción de inversión mejorada, por la cual YPF podría atraer a jugadores internacionales para formar emprendimientos conjuntos par explorar y producir, y las medidas de ganancia de la compañía mejorarían ya que los costos domésticos reflejarían su ‘realidad'».

 

Petróleo: precio bajo y ajuste

 

«¿Cuál será el impacto en los mercados emergentes y fronterizos de la continuación de los precios bajos del petróleo?», planteó el informe. «Parece comúnmente aceptado que los precios del petróleo seguirán bajos por más tiempo. El precio promedio de este año estará aproximadamente un 34% más bajo que lo que se estimó hace un año», estimó. «La esperanza de una recuperación rápida y durable de los precios del petróleo ha desaparecido prácticamente, en particular luego de la reunión reciente de la OPEC que básicamente eliminó toda limitación a la producción para sus miembros. En combinación con la fortaleza del dólar y una economía china más débil, todo indica que los precios del petróleo seguirán bajos en 2016.»

Según Exotix Partners, eso deja como probables perdedores a Angola (perdería el 21% del monto de exportación de petróleo de su PBI), Irak (15%), Kazajstán (10%), Nigeria (7,5%), Bolivia (7%), Ecuador (3%) y Ghana (2.5%). «Angola e Irak han sido especialmente golpeados, pero con una diferencia: Angola ha realizado ajustes e Irak, no». Al analizar la cuestión del ajuste, el informe insistió: «Lo que importa es quién ajusta las políticas (fiscal, monetaria y de cambio) a un ambiente de precios del petróleo más bajo, y quién no». Dado que no se trata de un shock temporario del precio del petróleo, los gobernantes de los países exportadores de petróleo «harían mejor en devaluar las monedas (para absorber el shock) en respuesta a una pérdida duradera en los ingresos gubernamentales».

Algunos de esos países ya han ajustado su moneda mucho. El informe cita a Brasil y Colombia entre los latinoamericanos. Otros, en cambio, «no han ajustado en absoluto, y hasta han apreciado la moneda; algunos están muy sobrevaluados en relación a su promedio»: Bolivia y Ecuador entre los de América Latina. El segundo caso tiene una consideración extra: «Ecuador, dolarizado, carece de flexibilidad monetaria, lo cual inclina el peso más hacia la política fiscal».

Venezuela aparece como caso aparte: «Es claramente vulnerable a la continuación de los bajos precios del petróleo, dadas sus opciones financieras limitadas, aunque no es demasiado tarde para una respuesta en sus políticas», sugirieron los analistas de la consultora.

En un estudio detallado de compañías de petróleo y gas, consideraron por separado —entre otras— a las siguientes:

YPF: «Permanece aislada de los precios internacionales (…) Cuanto mayor sea la grieta entre los precios internacionales y los locales, mayor será el riesgo de un corte significativo en los locales»;

Petrobras: «Sigue siendo un importador neto de crudo y productos del petróleo, por lo cual los precios internacionales más bajos son positivos en el corto plazo (…) Sin embargo, el balance neto de importaciones se ha reducido significativamente a medida que la producción aumenta y la demanda disminuye pues la economía continúa en una recesión profunda».

PDVSA: «Directamente golpeada por los precios débiles del petróleo, lo que reduce los fondos disponibles para gastos de capital (por lo tanto, la producción futura). Las exportaciones de crudo son virtualmente la única fuente de divisas en Venezuela. Si los precios del petróleo promedian los USD 50 por barril, tanto la capacidad de pago del país y de PDVSA podrían ponerse en cuestión».

No hay comentarios

Dejar una respuesta