Los seres humanos tenemos una fascinación por el pasado. Muchos de los edificios antiguos se han convertido en verdaderos centros turísticos ante la necesidad de conocer más de nuestros ancestros, pero ahora podemos conocer cómo fueron en su tiempo algunas de las siete ruinas más antiguas de la humanidad, gracias a una reconstrucción.
El sitio de viajes Expedia se dio a la tarea de hacer algunas animaciones para que sus lectores conozcan las edificaciones más famosas del mundo, como: El Partenón, Templo de Júpiter, Milecastle 39, Templo de Luxor, Zona Sacra di Largo Argentina, La Pirámide del Sol y Nohoch Mul Pyramid, estas dos últimas ubicadas en México.
«Los historiadores, arquitectos y viajeros se maravillan de estos remanentes del tiempo pasado, pero a menudo es difícil tener una idea de cómo se verían estos espectaculares edificios en su apogeo«, explicó el portal web.
En las animaciones se ve el estado actual de las construcciones y cómo recuperan sus colores y paredes originales gracias a la ayuda de la tecnología.
El Partenón
Este es uno de los templos más importante de la antigua civilización griega, dedicado a la diosa Atenea, la protectora de la sabiduría, la artesanía y la guerra.
Estuvo ubicado en la Acrópolis, una ciudadela de Atenas. Fue construido sobre otra edificación conocida como Hecatompedón del siglo VI a.C..
«En 1687 sufrió graves daños en la Gran Guerra de Turquía, pero gran parte de la robusta arquitectura dórica impidió la explosión, y una buena parte de ella sigue intacta hasta el día de hoy. Hoy en día es un punto de interés turístico que atrae a millones de visitantes al año«, explicó Expedia.
Nohoch Mul Pyramid (Coba)
Esta pirámide se encuentra en el estado de Quintana Roo. Tiene 137 pies de altura, por lo que es considerada la más alta de la península de Yucatán, al sur de México, y la segunda de la cultura maya con mayor altura en el mundo.
Este recinto maya fue construido entre el 100 aC y el 100 dC y fue abandonado alrededor de 1550, cuando llegaron los conquistadores españoles al país.
«Fue descubierto en el siglo XIX, pero el sitio arqueológico no se abrió al público hasta 1973, ya que la densa jungla que lo rodeaba dificultaba su localización», mencionó el sitio.
Templo de Júpiter
Este recinto estuvo dedicado al dios del cielo y el trueno, Júpiter, en la antigua ciudad de Pompeya, en la Bahía de Nápoles.
El Templo de Júpiter quedó sepultado por la explosión del Monte Vesubio en agosto del 79 dC, lo que también destruyó a Pompeya.
«El sitio fue redescubierto en el siglo XVI, y muchos años de excavación han dado a los millones de visitantes anuales una visión fascinante de la vida cotidiana de esta ciudad romana del siglo I», se lee en la página web.
Milecastle 39 (parte del Muro de Adriano)
Fue construido alrededor del siglo I dC. y existen varias teorías sobre su origen, pero según Expedia hay una muy creíble:
«La teoría más popular es que al convertirse en emperador romano en el año 117 dC, Adriano hizo construir el muro para hacer más seguro su imperio. Para aumentar la seguridad, se colocaron fortalezas conocidas como milcastles a lo largo de la pared a intervalos de aproximadamente una milla romana».
El Muro de Adriano se extiende a lo largo de 73 millas en Inglaterra.
Templo de Luxor
El edificio, conformado por obeliscos y arquitrabes épicos, se construyó por órdenes de Amenhotep III en 1380 a. C.
«El templo fue renovado por Ramsés II aproximadamente cien años después para incorporar una gran puerta de entrada al pilón y un patio abierto. Una vez se unió al vecino templo de Karnak por una avenida de esfinges, que custodiaban las puertas del templo», dijo el portal.
«El Templo de Luxor, que toma su nombre del término árabe, al-Uksur («fortificación»), ha sido un lugar sagrado«, añadió.
La Pirámide del Sol – Teotihuacán.
Esta pirámide visitada cada año por miles de turistas fue construida entre los siglos I y VII.
«Construyeron las primeras ciudades complejas de la región y luego desaparecieron misteriosamente. La Pirámide del Sol es el edificio más grande de Teotihuacan y una de las pirámides más antiguas del centro de México«, habló Expedia sobre los habitantes de la antigua civilización mesoamericana.
Zona Sacra di Largo Argentina – Templo B
Esta plaza alberga cuatro de las ruinas del templo romano. Fue descubierto en 1920 y es habitado por varios gatos que son alimentados y cuidados por los mismos turistas que en algunas ocasiones los adoptan.
«El Templo B es el más reciente de los cuatro templos, y seis de sus columnas, el tramo de escalones original y la alta están todos intactos. Los visitantes de la zona no solo encontrarán un sitio arqueológico fascinante, sino también cientos de gatos que viven entre las ruinas», señaló el sitio de viajes.
