El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo ayer que el “imperialismo” creó una causa para atacar a su esposa, Cilia Flores, luego de que dos familiares suyos fueran declarados culpables en Estados Unidos por delitos de narcotráfico.
“¿Ustedes creen que es casualidad que el imperialismo haya creado una causa que tiene como único objetivo atacar a la primera dama, a la primera combatiente, a la esposa del presidente?”, se preguntó Maduro en un acto proselitista, en Caracas, en conmemoración del Día Internacional por la Erradicación de la Violencia contra la Mujer.
En cadena obligatoria de radio y televisión, el presidente venezolano aseguró que existe “una política dirigida a acabar con una de las grandes fuerzas espirituales de la revolución que es el despertar de la consciencia y de los derechos históricos de la mujer”.
Esta es la primera reacción de Maduro que se produce más de una semana después de que Efraín Antonio Campo Flores y Francisco Flores de Freitas, sobrinos de la primera dama, fueran declarados culpables tras ser acusados de intentar exportar a EE.UU. unos 800 kilos de cocaína desde Venezuela, vía Honduras.
El jefe de Estado venezolano no hizo más comentarios y prefirió usar un “dejémoslo hasta allí”.
En el acto estaba presente Flores, expresidenta de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) y ex procuradora general de la República.
El caso ha levantado polémica en el país caribeño al punto de que el actual Legislativo, de mayoría opositora, aprobó un “acuerdo en rechazo al tráfico de influencias y al abuso de poder” por parte de ambos familiares de la primera dama, y pidió a Maduro “información veraz” sobre el caso.
La AN también solicitó ante la Fiscalía venezolana abrir un procedimiento de “antejuicio de mérito” contra Maduro por “sus presuntas vinculaciones” con el caso de narcotráfico de sus parientes y el supuesto uso de la rampa presidencial y de pasaportes diplomáticos para tales fines.