Marsha Blackburn, citando informes del sitio web Judicial Watch, dijo esta semana que ISIS tiene campos de entrenamiento de terroristas en México, justo al sur de la frontera con Estados Unidos.
En declaraciones para Breitbart News Radio, la congresista de Tennessee habló sobre funcionarios turcos que citaron el límite entre de Estados Unidos y México como un ejemplo de lo difícil que es cerrar una frontera.
«Me pareció muy interesaste la reacción de los turcos cuando nuestro presidente les dijo que cerraran su frontera sur… Ellos dijeron: ‘cierre usted su frontera sur'», afirmó. Y agregó que los turcos saben que los terroristas pueden hacer uso del límite sur de los EEUU.
«Sabemos por Judicial Watch y otros informes que los campos de entrenamiento de terroristas están ahí abajo», aseguró.
El Estado Islámico decapitó ante una multitud a un iraquí acusado de "brujería" https://t.co/0dMF6PVgEE pic.twitter.com/ogKQ4FK7SG
— Infobae América (@InfobaeAmerica) December 4, 2015
Blackburn no es la única republicana del Congreso que cita ese informe de Judicial Watch en el que se denuncian los campos mexicanos de ISIS, que en más de una ocasión fue desmentido por funcionarios estadounidenses, entre ellos por el director del FBI, James Comey.
La republicana, que también pidió suspender la llegada de refugiados sirios a territorio estadounidense, afirmó que hay que ayudar a los sirios pero en Medio Oriente. «Esos refugiados ni siquiera quieren venir aquí, por lo general, quieren estar en su región del mundo», afirmó.
Meses atrás, según difundió Proceso de México, la organización Judicial Watch alertó de que una célula del Estado Islámico (ISIS) opera en la colonia Anapra, al oeste de Juárez y a unos ocho kilómetros de la frontera con Texas, Estados Unidos.
«ISIS está operando un campo a pocos kilómetros de El Paso, Texas», indica la organización, que cita fuentes del Ejército mexicano y un inspector de la Policía Federal (PF).
En su portal digital, la organización detalla que «coyotes» que participan en el tráfico de personas –y que trabajan para Cártel de Juárez– ayudan a mover a los terroristas de ISIS por el desierto y por la frontera entre Santa Teresa y Sunland Park, Nuevo México. Las autoridades de EEUU negaron varias veces esta información.
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