Con la asistencia de unos 250 grupos y personajes carnavalescos, pero con una tímida asistencia de público, se lleva a cabo este domingo el cierre de la versión 2023 del Carnaval de Santiago, ensombrecido por la muerte de un niño.
Desde las tres de la tarde comenzaron a desfilar por la zona monumental los grupos congregados en la Unión Carnavalesca de Santiago, la Federación de Comparsas y Lechones de Santiago, así como el bloque independiente.
Un amplio dispositivo de seguridad resguardaba la zona del carnaval, que este año para el cierre tuvo cambio de ruta, comenzando en la calle República de Argentina, doblando por la Daniel Espinal, luego en la calle Del Sol, la Avenida Francia, tomando la Avenida las Carreras para concluir en la calle Sabana Larga, y desde ahí cada grupo se iría a desfilar en su barrio o sector para culminar.
La ganadora Rosa Santos, presidenta del comité organizador, valoró el esfuerzo para llevar a cabo esta fiesta cultural, y dijo que los grupos se comprometieron a estar presentes, e hicieron un llamado a las cabezas de grupo para que crearan conciencia en los lechones, y así lo hicieron.
Se recuerda, que al inicio del carnaval, los grupos no querían integrarse al desfile por el recorte en las dietas debido al poco apoyo económico que recibió el comité.
“Hay buena seguridad, delimitamos las áreas, hay seguridad policial, está el Ejército, Politur, el 911, la Defensa Civil, estamos todos integrados, tratando de que esto termine con la alegría acostumbrada y sin ningún tipo de problema”, expresó Santos.
En tanto que César Hernández, miembro del Comité Organizador, dijo que tras tomar una pausa prudente por la muerte del niño Donelly Martínez, retomaron el carnaval con el desfile final, siempre dando ejemplo de civismo y de la cantidad de grupos participantes.
Dijo que al principio de esta versión tenían poco apoyo económico, pero poco a poco el evento ha ido recobrando el mercadeo, al tiempo de recordar que no hay otro carnaval con tanta diversidad.