Nuevas directrices dietéticas emitidas por el gobierno de Estados Unidos el jueves hacen a un lado las estrictas normas de sodio incluidas en su última versión, aunque siguen afirmando que se consume demasiada sal. Las recomendaciones alertan sobre los peligros del colesterol y añaden nuevos consejos sobre los azúcares.
Una nueva recomendación es que el azúcar añadida debe ser el 10% de las calorías diarias. Eso es alrededor de 200 calorías al día o más o menos el equivalente a una bebida azucarada de 473 mililitros (16 onzas). La recomendación es parte de un esfuerzo más amplio por ayudar a los consumidores a identificar los azúcares añadidos de origen natural como aquellos en frutas y leche. Los azúcares añadidos generalmente agregan calorías vacías a la dieta.
Luego de una fuerte reacción de la industria de la carne y el Congreso, el gobierno de Barack Obama ignoró varias sugerencias de un informe de febrero elaborado por un comité consultivo de doctores y expertos en nutrición. Ese panel sugirió designar una dieta limitada en carnes rojas y procesadas y restar importancia a las carnes magras en su lista de las proteínas que son parte de una dieta saludable.
Pero como en los años anteriores, el gobierno sigue diciendo que las carnes magras son parte de un patrón de alimentación sano.
Si bien las directrices siempre han sido objeto de intenso cabildeo por parte de las industrias de alimentos, la versión de este año desencadenó un debate político sin precedentes, avivado por las reclamaciones de los republicanos al gobierno de Obama sobre que ha ido demasiado lejos al decirle a la gente qué comer.
Emitidas cada cinco años, las normas están diseñadas para ayudar a los estadounidenses a prevenir enfermedades y la obesidad. Informan de todo, desde las etiquetas de los alimentos empaquetados para los almuerzos escolares subsidiados hasta los consejos de los doctores. Y el mensaje principal no ha cambiado mucho durante los años: comer frutas y vegetales. Granos enteros y mariscos también. Y mantener el azúcar, grasas y sal en moderación.
Este año, un mensaje que el gobierno quiere mandar es que la gente debe averiguar qué estilo de alimentación saludable funciona para ellos, mientras sigue emitiendo las recomendaciones principales. El Departamento de Agricultura, que emite las directrices junto con el Departamento de Salud y Servicios Humanos, también divulga una versión modificada de su conocido plato saludable para incluir un nuevo lema: “Mis Victorias”.
“Pequeños cambios pueden sumar grandes diferencias”, dijo el secretario de agricultura, Tom Vilsack.
Los estadounidenses también necesitan reducir el consumo de sal, dice el gobierno. Nuevas cifras de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades muestran que alrededor del 90% de la gente come demasiado. La persona en promedio ingiere 3.400 miligramos de sodio al día, y las directrices dicen que todos deberían reducir esa cantidad a 2.300 miligramos, equivalente a una cuchara de té.