Según Rick Maglione, el jefe de policía de Fort Lauderdale, el detenido se nombra Nathaniel Petgrave, y es también un habitante de la calle, que había tenido varios encuentros con la policía antes y durante la serie de crímenes que aterrorizaron a los desamparados de la ciudad.
El pasado 20 de octubre dos hombres que dormían en una gasolinera abandonada fueron atacados a tiros. Uno de ellos murió en el lugar y el otro, que recibió un disparo en el cuello, sobrevivió, señaló la policía. Al día siguiente otro habitante de la calle murió de un disparo en la cabeza frente a un supermercado.
Las cámaras exteriores de seguridad de ese establecimiento mostraron cómo el hombre hablaba con otro antes de su muerte. Un testigo reconoció a la otra persona y puso a la policía sobre la pista de Petgrave.
Pero antes de que Petgrave fuera detenido, se halló, el 27 de octubre, el cuerpo sin vida de un desamparado muerto a golpes en un depósito. Sobre su cuerpo el asesino había escrito con sangre «4 STOP WAIT TIME» (4 y empieza la cuenta atrás).
Cuando se le preguntó a Petgrave por qué había escrito el número cuatro éste dijo que pensaba que había matado a cuatro personas, pues no sabía que una de las víctimas había sobrevivido, señaló CBS.
En septiembre pasado la policía le incautó a Petgrave un arma de fuego con la que estaba disparando a una diana pero se la devolvió pocos días más tarde porque comprobó que tenía permiso para portar armas, pues solía trabajar como guardia de seguridad.
Petgrave tuvo un segundo encuentro con la policía cuando los crímenes ya habían empezado, pues fue detenido por robar un automóvil, aunque quedó en libertad enseguida.
Aparentemente regresó a la comisaría para buscar algunas de las pertenencias que le incautaron cuando pasó por el calabozo y fue en ese momento cuando fue detenido como sospechoso, señaló CBS.
