El presidente Nicolás Maduro hizo los primeros anuncios tras la derrota del oficialismo en las elecciones legislativas.
“Quiero anunciar que producto de todo este proceso de revisión y reimpulso, le he pedido al Consejo de Ministros que ponga su cargo a la orden para hacer un proceso de reestructuración, renovación y reimpulso profundo de todo el gobierno nacional, de todas las áreas del gobierno, de todos los ministerios”, dijo.
Maduro dijo antes que no aceptará una ley de amnistía para liberar a los llamados presos políticos, algo que los diputados electos de la Mesa de la Unidad Democrática —que ganó 2/3 de la Asamblea Nacional— propusieron en sus campañas.
“Graves delitos de lesa humanidad imprescriptibles de acuerdo a la constitución se cometieron en las guarimbas, así lo digo, como jefe de Estado no aceptaré ninguna ley de amnistía, porque se violaron los derechos humanos y así lo digo y así me planto, me podrán enviar mil leyes, pero los asesinos de un pueblo tienen que ser juzgados y tienen que pagar”.
Una de los políticos encarcelados más notorios es Leopoldo López, sentenciado a 13 años de prisión tras ser hallado culpable de los delitos de instigación pública, asociación para delinquir y determinador en daños e incendio por los hechos de violencia desatados tras una manifestación opositora en febrero de 2014.
Además, Maduro aseguró que va a renovar la Ley de Estabilidad Laboral, que le impide a las empresas a despedir empleados a menos que el gobierno lo autorice.
«Mientras yo esté aquí, los trabajadores no serán despedidos», dijo.
Sobre el resultado de la elección legislativa, el mandatario dijo que «ganaron los malos».
«Se cometió un error, fue un voto contra ustedes mismos»