El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, presentó este viernes en Nueva York un plan de prevención contra el extremismo violento que se estructura en 70 medidas y que, en líneas generales, reclama más acción a los gobiernos para evitar que el mensaje de los grupos terroristas siga seduciendo a jóvenes desencantados que se acaban convirtiendo en asesinos. El programa, que se expuso en una sesión informativa ante los representantes de la Asamblea, pide que se destinen más fondos y plantea la creación de una plataforma permanente en la ONU para controlar la aplicación de las actuaciones.
Ban Ki-moon condena el ataque terrorista perpetrado contra la base de AMISOM en Somalia https://t.co/uKDtVVbXaC pic.twitter.com/gc9mZ53OW4
— Naciones Unidas (@ONU_es) January 16, 2016
La comunidad internacional ve con asombro cómo jóvenes nacidos en países como Estados Unidos son capaces de acabar convencidos del mensaje de ISIS (las siglas en inglés del autodenominado Estados Islámico) y perpetrar una matanza como la de San Bernardino (California). También el Gobierno español admitió en septiembre que los yihadistas estaban captando cada vez a gente más joven -y muchas mujeres- nacidos en países occidentales.
El Consejo de Seguridad insta a #Mali a cumplir con el acuerdo de paz https://t.co/4N4ldA1N39 pic.twitter.com/1dUHuwg0Vm
— Naciones Unidas (@ONU_es) January 13, 2016
Para la ONU, hace tiempo que quedó claro que la acción militar no basta para solucionar el problema del terrorismo y que la lucha contra la propaganda es crucial. Por eso las medidas que Ban Ki-moon presentó ponen el acento en el diálogo religioso, la educación y la igualdad y propone que acciones como el fomento de los intercambios culturales entre jóvenes de distintas culturas -algo así como un Erasmus global- y que las compañías tecnológicas colaboren en la lucha contra las comunicaciones que alimentan el odio.
Ban Ki-moon condena el atentado suicida en #Estambul https://t.co/oqd4hYNHJN pic.twitter.com/HOXyzNvCou
— Naciones Unidas (@ONU_es) January 12, 2016
Aunque los representantes de los países aplaudieron la iniciativa de Ban, las preguntas posteriores sirivieron para èdir más detalles de la propuesta y para poner sobre la mesa el problema del dinero: si eran nencesarios más recursos y de dónde saldrían estos. El secretario general de la ONU abrió la puerta a una «fondo adicional» si este se demostrara necesario, aunque señaló que primero «querría ver qué se puede hacer con los fondos ya existentes».